La Policía de Investigaciones (PDI) desplegó este viernes una serie de allanamientos en viviendas de Rosario y Villa Gobernador Gálvez y en prisiones del sur provincial, en el marco de una investigación de extorsiones y amanzas. Como resultado de los operativos se secuestraron armas de fuego, municiones, drogas, teléfonos y dinero en efectivo, entre otros bienes, y se detuvo a 16 personas, cinco hombres y once mujeres. La hipótesis es que los detenidos forman parte de una organización comandada por el “Gordo Dani” y se dedicaba a cometer hechos ilícitos ordenados desde prisión.
Los procedimientos tuvieron lugar en la Unidad Penitenciaria Nº11 de Piñero; en la Subunidad N°3, en 27 de Febrero al 7800, y en los domicilios de calle Bouchard al 3600, José Agrelo al 2400, De la Salle al 5700, Cochabamba al 7400, Spiro al 400 bis, Roma al 200 bis, Grandoli al 3800, Biedma al 100 bis, en Rosario; como así también en calle Suipacha al 1600, R. Thompson al 1900, Tomas Edison al 100, Dorrego al 100 y pasaje 5 al 1900, en Villa Gobernador Gálvez.
Como resultado, la Policía aprehendió a Milagros M., de 26 años; María A., Gianella R., Naila M., Ludmila L. y Carmen Z., de quienes no se precisó la edad; Paola A. (46), Sasha M. (22), Iara G. (20), Tamara M. (29) y Silvina G., de 35 años. También arrestaron a Diego F., Alberto M., Edgar F., Cristian C. (26), Walter R. (44) y a un menor.
Además se secuestraron cuatro armas de fuego, cartuchos de diversos calibres, material estupefaciente, un indoor (cultivo en interior), teléfonos celulares, chips, tarjetas de memoria, una motocicleta con pedido de captura, un automóvil, dos balanzas de precisión y dinero en efectivo.
Según se informó oficialmente, la Brigada Operativa de la División de Balaceras y Extorsiones de la PDI avanzó en la investigación de un hecho extorsivo cometido en marzo: un hombre denunció haber recibido amenazas por parte de personas desconocidas, en las que lo amedrentaban para que abandone la casa en la que reside. La investigación de esa denuncia abrió nuevas pistas de una serie de delitos encadenados: “Se pudo establecer que se trataba de una banda que se dedicaba a realizar diversos hechos ilícitos, ordenados desde la cárcel”, se explicó.
En el caso intervino el fiscal Federico Rébola y, con datos sobre la organización, se libraron las órdenes de allanamiento, “arrojando resultados positivos”. Ahora, tras analizar las nuevas fuentes de información obtenidas este viernes, se determinarán las responsabilidades de los detenidos y se fijará fecha para la audiencia imputativa.
