Una mujer de 41 años fue detenida anteayer en su casa de la localidad de Villa Amelia, durante un procedimiento ordenado por el Juzgado de Instrucción de la 9ª Nominación y llevado a cabo por la Sección Seguridad Personal de la Unidad Regional II. Está sospechada de al menos un hecho de estafa con un modus operandi específico: publicaba avisos clasificados ofreciendo créditos y se las arreglaba para sacarle algo de dinero a sus clientes, a quienes nunca entregaba la suma pautada. Fue identificada a través de la patente de su auto.
Según informaron fuentes policiales, el allanamiento fue realizado anteayer al mediodía por personal de la Sección Seguridad Personal de la Unidad Regional II, en una casa ubicada a la altura del kilómetro 11,5 de la Ruta 18, en la zona rural de la localidad de Villa Amelia, a unos 25 kilómetros al sudoeste de Rosario.
De acuerdo con los voceros, allí fue detenida María Esther N., de 41 años, quien fue puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de la 9ª Nominación, cuyo titular, Javier Beltramone, investiga la causa y ordenó las actuaciones.
Fuentes tribunalicias señalaron que el modus operandi de la sospechosa consistía en publicar avisos clasificados en el diario La Capital y en el Rubro 7, en los que ofrecía créditos personales de dinero, que luego no entregaba.
La investigación comenzó con un caso en particular. Una mujer leyó el aviso y llamó al número telefónico que allí figuraba para solicitar un préstamo por 15 mil pesos. Al otro lado de la línea atendió un hombre, quien le pidió su dirección y le dijo que iba a enviarle a su secretaria, Marita.
Momentos después, la tal Marita llegó a la casa de la víctima, a bordo de un Fiat Uno, y comenzó a desplegar su actuación: hizo que la mujer le exhibiera su DNI, del que también le pidió una fotocopia, al igual que algunas facturas y recibos.
Pero antes de cerrar la transacción, le pidió 120 pesos para cubrir algunos gastos administrativos. Al recibir el dinero, Marita entregó a la víctima un recibo, en el que colocó sus iniciales: M. E. N.
Si el refrán dice: “hombre precavido vale por dos”, lo mismo vale para las mujeres. Cuando Marita se estaba retirando del lugar a bordo de su auto, la víctima anotó en un papelito la patente del rodado. Por las dudas. Y su intuición no le falló. Nunca más volvió a ver a Marita, pero logró una pista que resultó fundamental.
Es que fue el dominio del auto el que llevó a los investigadores hasta María Esther N. (M. E. N.). Luego de que la mujer radicara la denuncia, los investigadores solicitaron el informe de la patente.
Así se enteraron que el vehículo estaba a nombre de un hombre, quien al ser consultado dijo que había vendido su Fiat a otro. Éste último a su vez, había vendido el auto a un tercero que, a su vez, había vendido el coche a María Esther, explicó un vocero de la investigación.
Así, el juez de Instrucción Javier Beltramone ordenó el allanamiento en el que fue detenida la mujer, quien está sospechada del delito de estafa.
Y, si bien el monto de la maniobra no es demasiado significativo, como la mujer se anunciaba por medio de los clasificados, no descartan que aparezcan nuevas víctimas que no hayan denunciado en su momento, explicó una fuente policial.
La mujer quedó detenida en Seguridad Personal de la Unidad Regional II y a disposición del Juzgado de Instrucción 9ª.