El mediático y periodista Marcelo “Teto” Medina fue detenido en las primeras horas del jueves por por reducción a la servidumbre, abandono de persona, estafa y explotación laboral.
La detención, que estuvo a cargo de la División de Delitos Cibernéticos contra la Niñez y la Adolescencia de la Policía Federal Argentina, se realizó en su vivienda ubicada en el barrio de Palermo.
A su vez hubo otros 26 allanamientos realizados por la Dirección de Investigaciones Complejas de la Policía Bonaerense en La Matanza, General Rodriguez, Florencio Varela, Quilmes y Almirante Brown.
Momento de la detención en su domicilio en Palermo
Los mismos se realizaron en 19 casas particulares y 7 quintas de rehabilitación que no estaban habilitadas para funcionar como tal. Allí otras 16 personas fueron detenidas.
Según informaron fuentes policiales a NA las investigaciones comenzaron tras la denuncia de 10 víctimas que trabajaban en los diversos lugares: “Se informó que en una Comunidad Terapéutica (“La razón de vivir”) orientada para personas con adicciones en la zona sur de la Provincia de Buenos Aires, estarían sometiendo a trabajos y servicios de servidumbre con fines de explotación laboral a quienes asisten para su rehabilitación, identificándose aproximadamente a 200 víctimas, mayores y menores de edad”.
Rol que desempeñaba el conductor
Se pudo constatar, a través de diversos posteos que realizaba la comunidad en sus redes sociales, que el “Teto” Medina era operador de la organización al que se había sumado tras recuperarse de su adicción a las drogas.
Publicación en la red social de la comunidad contra las adicciones
En las publicaciones se constata que el conductor realizaba charlas motivacionales en los diversos centros: “Soy especialista en adicciones y operador socioterapéutico”, sostiene en su cuenta de Instagram.
“Reunión con el Teto y sus charlas motivacionales que ayudan a los chicos a transitar su tratamiento con más fuerza y alegría. Porque vivir sin adicciones es posible”, se observa en uno de los posteos de la comunidad.
Desde el Juzgado de Garantías N°8 de Florencio Varela, a cargo de Adrián Villagra, aseguran que “La razón de vivir” no tiene autorización para funcionar como una comunidad en esta quinta.
Antecedentes
El pasado 9 de agosto un empleado de seguridad fue condenado por una muerte dudosa en la comunidad terapéutica San Camilo de Pilar. Es la primera condena que se dictó desde la sanción de la Ley de Salud Mental.
El juez remitió el veredicto a la Subsecretaría de Salud Mental, Consumos problemáticos y Violencias de la Provincia y pidió que se investiguen otros casos ocurridos en San Camilo, que cerró en 2017 tras las denuncias de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) por torturas, privaciones ilegales de la libertad y abusos sexuales.
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