La ciudad de Rosario vivió una nueva celebración por el Día de la Bandera en plena pandemia. El acto contó con la presencia del gobernador, Omar Perotti y el intendente, Pablo Javkin. Mientras que el presidente Alberto Fernández participó por videoconferencia desde la Quinta de Olivos.
Bajo una escasa visibilidad producto de la niebla y con distanciamiento social y todos los protocolos vigentes, Javkin y Perotti iniciaron las actividades con el tradicional izamiento de la bandera en el mástil mayor del Monumento junto a funcionarios nacionales, provinciales y municipales.
«Nos toca vivir un día de la bandera distinto. El año pasado esperábamos celebrar el bicentenario con las calles colmadas. No pudimos, este año tampoco», afirmó el intendente de la ciudad. Y agregó: «La reconstrucción no será sencilla, pero estaremos a la altura. Tenemos el paño celeste y blanco de unión y fraternidad que nos protegió siempre».
Luego fue el turno del gobernador Omar Perotti, quien recordó una frase de Belgrano: «Es preciso hacer cosas extraordinarias y sacrificarlo todo por la salud de la Patria». Y se explayó: «Ese ejercito enemigo hoy es el virus que si nos encuentra desprotegidos, sin cuidados, sin distancia, sin duda crece».
Por último, el presidente Alberto Fernández tomó la palabra por videoconferencia desde Olivos y afirmó que la bandera «es el símbolo central de la Patria» y representa «tres ideales: la libertad, la igualdad y la solidaridad», que en tiempos de pandemia de coronavirus «tiene un valor enorme». Luego realizó la jura de la bandera junto a niños y niñas.
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Pasadas las 11, y ante varias dudas por las inclemencias meteorológicas, se decidió que se realizara el desfile de aviones Hércules por el cielo de la ciudad. A pesar de la niebla, que impidió que vean en el Monumento, se pudo disfrutar de su paso desde varios puntos de la ciudad, y lo que no lo vieron igual se alertaron por el impresionante ruido.
