Salario y beneficios atractivos, seguridad laboral, oportunidades de desarrollo profesional y posibilidad de trabajo remoto son algunas de las características del empleo ideal para los argentinos.
Así lo reveló una encuesta de la consultora Randstad, que detalló, en orden de importancia, los siete rasgos que definen al empleador ideal, en vísperas del 1 de mayo:
— Ambiente laboral: es, por tercer año consecutivo, el factor más valorado por los argentinos a la hora de priorizar los atributos que definen al empleador ideal.
— Salario y beneficios: si bien salario y beneficios sigue siendo uno de los motivos más importantes a la hora de elegir un empleador, definitivamente ya no es el único. Los factores no monetarios son los que vienen creciendo en valoración en los últimos años.
— Seguridad laboral: la incertidumbre y la coyuntura económica adversa que atraviesa actualmente la Argentina potencian el rol de la seguridad laboral a largo plazo al momento de identificar los factores más relevantes para los argentinos al elegir un empleador.
— Formación y desarrollo: las empresas que ofrecen oportunidades de desarrollo profesional corren con ventaja en términos de atractivo empleador.
— Equidad: es un factor clave para todos los trabajadores y en especial para las mujeres.
— Equilibrio entre vida personal y laboral: se consolida dentro del «top ten» de los factores más valorados por los trabajadores argentinos. El paso de la pandemia ha cambiado significativamente el rol que el trabajo tiene en la vida de las personas y la mayoría de los trabajadores sostiene hoy que su vida personal es más importante que su vida laboral.
— Trabajo remoto: es la gran conquista que ha dejado el paso del Coronavirus para una parte de los trabajadores del mundo, y la Argentina no escapa a esa realidad.
Sobre estas características, la CEO de Randstad para Argentina, Chile y Uruguay, Andrea Ávila, afirmó: «conocer estos factores que valoran los candidatos a la hora de elegir una empresa para trabajar, que son los más importantes pero no los únicos, le permite a las organizaciones definir y comunicar su propuesta de valor para el talento y gestionar su marca empleadora para seguir siendo atractivas a los ojos de los trabajadores, especialmente en momentos en que las expectativas y los intereses de la fuerza laboral están cambiando en todo el mundo».
«Hoy se da una competencia transversal por el talento más allá del sector y las fronteras, ya que muchas búsquedas, especialmente las de perfiles escasos, se hacen a escala global, a partir de una mayor deslocalización del trabajo y el avance del trabajo remoto, haciendo que los candidatos tengan cada vez más opciones a su alcance», agregó.