Desde 2003 y por decisión de la Organización Mundial de la Salud, cada 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio. En este marco, la secretaria de Salud Pública Soledad Rodríguez y el concejal y psiquiatra Lucas Raspall se refirieron al cambio de paradigma que desde el municipio y el Concejo Municipal impulsan para el abordaje de la problemática.
“Hay que hablar de suicidio porque hay que hablar de todas las cosas que nos pasan. Y el suicidio, de hecho, es un tema de salud pública y merece que sea tratado, no sólo por los medios, si no por todas las personas, cada una en su lugar, con la debida sensibilidad”, sostuvo Raspall en diálogo con la prensa. Precisamente, un correcto abordaje de la temática en medios masivos de comunicación supone uno de los aspectos fundamentales de este nuevo paradigma, que intenta visibilizar y no ocultar esta problemática de salud mental para reducir el estigma y crear conciencia sobre la prevención.
Consultado sobre las maneras de ayudar, el edil señaló: “Escuchando. Se ayuda escuchando. Para que nadie quede ahí prendido en el miedo de no saber qué decir y entonces minimizar el dolor del otro o no escucharlo, lo que es prudente es saber que el que ayuda es el que escucha, no solamente el que tiene algo para decir como si hubiese alguna sabiduría de encontrar la palabra exacta que te saque de ahí”.
Por su parte, Soledad Rodríguez destacó: “Desde la Secretaría de Salud Pública tenemos nuestra amplia red desde el territorio, cada centro de salud con el equipo de referencia y de confianza de cada familia, de cada persona, está ahí para escuchar. Luego tenemos hospitales con sus guardias en momentos en que quizás son horarios en que no funciona la parte ambulatoria programada, y también están los consultorios. También tenemos nuestra línea de llamado, que es el 107, que recibe multiplicidad de consultas”.
“Aquí lo importante es la escucha y la recepción, el alojar. Entonces tanto en la salud pública como en los otros ámbitos de salud privada, siempre es bueno pedir ayuda en aquel equipo o en aquel profesional en quien la persona confía, la persona o la familia”, sostuvo la funcionaria municipal, y agregó: “En este sentido y en esta idea de comenzar a hablar y cambiar el paradigma, desde la Secretaría de Salud, desde el municipio entero, en conjunto con el Concejo, estamos iniciando una línea de nuevos conversatorios, charlas, capacitaciones, con este objeto de que cada vez podamos alojar y escuchar con más corazón, con más empatía y de un modo que pueda ayudar”.
En ese sentido, es importante remarcar la reciente aprobación por parte del Concejo Municipal de la Ordenanza Nº 10610/2024 con la creación del programa ‘Rosario habla de suicidio’, que aborda la capacitación, la prevención y la posvención de la problemática del suicidio.
La normativa, promulgada por el Ejecutivo municipal, propone capacitaciones en materia de prevención y abordaje del suicidio para equipos municipales, así como formaciones abiertas a profesionales de la salud, la educación, el deporte, la seguridad, la política, las organizaciones de la sociedad civil, los medios de comunicación y todos los actores que cumplan un papel relevante en la detección de riesgo y la intervención en crisis.
A su vez, plantea la realización de campañas de comunicación y difusión sobre la problemática del suicidio en redes sociales, radio y televisión, entre otros medios masivos y contempla la creación de los ‘Equipos lnterdisciplinarios Especializados en Prevención y Posvención de la Problemática el Suicidio’ en el ámbito de la Salud Pública.
Si necesitás ayuda o conocés a alguien que la necesita, podés acercarte a cualquiera de los centros de salud, hospitales o efectores médicos de la ciudad. También podés comunicarte telefónicamente y de manera gratuita al número 107.
Algunos datos
Según la Organización Mundial de la Salud, unas 800 mil personas se suicidan cada año, lo que representa una tasa estimada de 11,4 muertes por cada 100 mil habitantes. Las muertes por propia voluntad representan la segunda causa de fallecimientos entre los jóvenes de entre 15 a 29 años, después de los accidentes de tránsito.
Las últimas cifras de suicidio en la Argentina aportadas por la Dirección de Estadísticas e Información en Salud (DEIS), que depende del Ministerio de Salud de la Nación, son del año 2014 e indican que en ese año se produjeron 3.340 defunciones por suicidio en la población general. La tasa de mortalidad por suicidio fue de 7,8 por cada 100.000 habitantes.
En coincidencia con las tendencias internacionales, la mayor cantidad de muertes por suicidio se presentó entre los adolescentes y adultos jóvenes, con 976 fallecimientos en el grupo de 15 a 24 años. Esto representó una tasa de 13,8 fallecidos por suicidio por cada 100.000 habitantes, en tanto que ese año (2014) bajó la cantidad de suicidios en los adultos mayores en comparación con una década atrás. Pero al mismo tiempo creció la tasa de suicidios en adolescentes y adultos jóvenes en comparación con 2004.
