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“Diablo”, una comedia negra

La película, de Nicanor Loreti, está protagonizada por Juan Palomino, quien encarna a un boxeador peruano de origen judío.

El actor Juan Palomino encarna a un boxeador llamado Marcos Wainsberg, apodado el Inca del Sinaí.

Diablo, del argentino Nicanor Loreti, film estrenado el jueves en los complejos de cine rosarinos, ganador en la edición 2011 del Festival de Mar del Plata, es un largometraje que, con mucha inteligencia, encaja en el género de policiales y comedias negras del estilo de los films de Robert Rodríguez y Quentin Tarantino como Machete y Planet Terror.

La producción cuenta, en formato de película de acción virada hacia lo más negro, cómo un ex campeón de boxeo se ve involucrado en una disputa entre bandas mafiosas a partir de que permite el ingreso a su casa de Hugo, su primo.

El film tiene mucho humor, cuotas de rock and rol, heavy metal y algo de violencia extrema, pero con guiños a la idiosincrasia argentina.

En la película, el actor Juan Palomino encarna a un boxeador peruano de origen judío llamado Marcos Wainsberg, apodado el Inca del Sinaí, que abandona el boxeo luego de la muerte de un rival en el ring.

Con momentos de humor bizarro, Loreti rodeó a Palomino de comediantes como Sergio Boris, que encarna a Hugo, el primo del campeón; al ex Triciclos-Clos Luis Aranosky y al actor Luis Ziembrowski, quienes, cada uno a su tiempo, generan los momentos más hilarantes del film.

Para los amantes del cine clase B argentino, Loreti rescató a Hugo Kato Quiril, uno de los malos de los films Extermineitors y Los bañeros se divierten que entre los 80 y los 90 filmaron Emilio Disi y Guillermo Francella, entre otros.

Entre cigarrillos de marihuana, cervezas en exceso, violentas peleas en una ducha y en un living de un departamento en estado ruinoso, transcurre la trama de este entretenido y novedoso  film argentino que, al menos, cultiva un estilo diferente al resto.

Loreti escribió el guión en 2010 junto a Nicolás Galvagno. “Lo hice con la idea de armar un policial negro, con elementos de la comedia negra, en un estilo que enla Argentinano se trabaja mucho”, según expresó el realizador.

“Este tipo de films no se hace acá, es raro ver una película argentina dentro de este estilo. Afuera sería una película de acción clásica, más o menos comercial”, expresó Loreti a la agencia de noticias Télam.

El cineasta analizó las decisiones que suelen tomar los productores argentinos: “No toman este tipo de películas, no quieren correr riesgos, no salen de las historias típicas que están más ligadas al costumbrismo”.

Igualmente, durante la reciente edición del mercado Ventana Sur, Diablo fue vendida a varios países, además de que el canal premium Moviecity ya la adquirió para emitirla en América latina y los Estados Unidos.

En una charla con Télam, el director explicó que antes de filmar la película decidió ensayar con Juan Palomino, Sergio Boris, Luis Aranosky y Luis Ziembrowski. “Los ensayos previos sirvieron de mucho, cambiamos mucho el guión en base a lo que surgía, y diría que el film tiene un 30 por ciento de improvisación, surgida en los estudios”, reseñó el cineasta.

Loreti, director del notable documentalLa H, que cuenta la historia del grupo local de heavy metal Hermética, dotó al personaje de Palomino de sus gustos, ya que el boxeador luce a lo largo de la película remeras de bandas como Motorhead, V8, la propia Hermética y Riff, mientras que Mauro García Barbe, quien escribió la música del film, compuso algunas canciones que remedan el género trash. De hecho, García Barbe, compositor de bandas de sonido para película, integró en los 90 una banda de heavy metal como tecladista.

Respecto de los cambios en el guión, fue Palomino quien propuso que Marcos, su personaje, fuera peruano y judío y su apodo fuera el Inca del Sinaí. “A partir de allí –continuó el director–, resolvimos tirarles el racismo encima a los personajes que son sus enemigos para que todo sea bien exacerbado, extremo”.

Loreti quedó sorprendido por el trabajo de Palomino en el film Cacería, de Ezzio Massa, y allí decidió que era el hombre ideal para encarnar a Marcos. “Juan da muy bien en comedia y en sus roles de hombres violentos. Además, cuando nuestro maquillador comenzó a trabajar con él, y le dejó esos bigotes largos y gruesos bien mexicanos, nos dijimos que se parecía a Dany Trejo en Machete”, señaló el realizador, al tiempo que sobre el resto del elenco completó: “Con Sergio Boris y Luis Ziembrowski trabajamos en Parapolicial negro, un documental que cuenta la prehistoria dela Triple Ay del que fui el asistente de dirección”.

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