Emiliano Dibu Martínez se quedó este lunes con el Premio Yashin 2024 que distingue al mejor arquero del mundo durante la gala del Balón de Oro que entregó la revista France Football en colaboración con la UEFA y que se celebró en el coqueto Teatro Le Chatelet de París, en el corazón de Francia.
Dibu, campeón con la Selección Argentina en la Copa América de Estados Unidos y gran responsable con sus atajadas de que Aston Villa terminara cuarto en la Premier League y volviera a la Champions League, es el amo y señor de los arcos y retuvo la distinción que había conseguido en 2023. En aquella ocasión, el hombre formado en las divisiones inferiores de Independiente tenía el impuso de haber sido una de las grandes figuras en el Mundial de Qatar 2022. Es la primera vez en la historia que alguien repite en años consecutivos el premio Yashin -la leyenda rusa fue el único en su puesto que ganó el Balón de Oro-.
Ver esta publicación en Instagram
Una publicación compartida de Diario El Ciudadano (@diarioelciudadano)
«Muchas gracias a todos. Es un honor estar acá otra vez. Agradecido al Toro por meter el gol en la final (de la Copa América), a la Selección, a los entrenadores de arqueros que me acompañan hoy. Lo individual siempre viene después de lo grupal», sostuvo al recibir el trofeo de manos de Lautaro Martínez, su compañero en la Scaloneta, que quedó como el séptimo mejor futbolista del año en la premiación principal. Luego mostraron un video con sus highlights de su espectacular temporada bajo el título de «El impasable», con la música de un western.
Es el primer arquero en ganar dos veces seguidas el premio al mejor del mundo. «Yo apenas soñaba con jugar un partido con la Selección. Esto es increíble», se sinceró antes de responder sobre su carácter explosivo dentro de la cancha. «Para ser justo no me veo como el mejor. Lo único que mi importa es el equipo, Aston Villa y la Selección. Trabajo todos los días para estar en este nivel», remarcó.
«Es alguien muy especial. Ayuda a todos, a los más jóvenes. Sólo puedo decir cosas bonitas de él. Todo lo que hace lo hace porque quiere ganar y no va más allá de eso», lo describió Lautaro, que se mantuvo en el escenario antes de bromear que en una serie de diez penales le convertiría entre cinco y seis. «Espera hasta último momento, es muy grande», sumó el capitán del Inter a la hora de elogiar su tocayo de apellido.
El marplatense, que había quedado 18° en la pugna por el Balón de Oro, le ganó en la votación a Andriy Lunin (Real Madrid/Ucrania), Diogo Costa (Porto/Portugal), Gianluigi Donnarumma (PSG/Italia), Giorgi Mamardashvili (Valencia/Georgia), Gregor Kobel (Borussia Dortmund/Suiza), Mike Maignan (Milan/Francia), Ronwen Williams (Mamelodi/Sudáfrica), Unai Simón (Athletic Club de Bilbao/España) y Yann Sommer (Inter Milán/Suiza).
Además de su familia -desfiló por la alfombra roja con su esposa Mandinha-, el Dibu tuvo el gesto de llevar a París al argentino Martín Tocalli y al español Javier García García, que son sus entrenadores en la Scaloneta y en el conjunto de Birmingham. Claro, sabe que el puesto del arquero es ingrato, pero que sus atajadas son el producto del trabajo colectivo con sus colegas y con sus preparadores.