El director del Pami, Carlos Regazzoni, confirmó que hizo una denuncia penal contra lo que llamó una «red de corrupción» que dentro del organismo vendía medicamentos supuestamente destinados a afiliados ya fallecidos.
«Advertimos patrones de consumo y faltas de controles en lugares que hacen sospechar que puede haber una red de corrupción. Y este modus operandi no sólo ocurre con el Pami, por lo que lo ponemos en mano de la Justicia», indicó el funcionario en conferencia de prensa.
Regazzoni señaló que ya comenzó un trabajo de «auditorías internas» para dar con los responsables de «estas redes de corrupción que se apropian de los fondos públicos» y agregó: «Cuantas cosas podríamos haber hecho con estos fondos mal utilizados».
«El servicio debe mejorar, lo dicen los mismos empleados», apuntó.