Un hombre de 58 años fue detenido luego de protagonizar una noche de furia este sábado en la ciudad de Rufino en la que le disparó a dos niñas y a su madre, les quemó la casa, baleó a un hombre y luego se tiroteó con policías del Comando Radioeléctrico de esa localidad del sur santafesino, quienes lo hirieron en una pierna antes de apresarlo con una carabina calibre 22. Las víctimas fueron internadas con estado reservado. Entre los delitos que le imputará la Fiscalía figuran cuatro tentativas de homicidio.
Voceros del caso informaron que todo comenzó alrederor de las nueve de la noche del sábado, cuando los bomberos voluntarios debieron sofocar el fuego en una vivienda ubicada en la zona rural de Rufino, cerca de la ruta nacional 7, donde vivía una mujer de 42 años y sus dos hijas de 10 y 14.
Además de las llamas, cuando los bomberos llegaron al lugar se encontraron en inmediaciones de la vivienda a las dos menores baleadas. La niña de 10 años tenía dos disparos en la espalda y su hermana mayor otros dos balazos en las piernas.
En esos momentos, otro llamado alertó a la Policía sobre una mujer baleada en un hotel lindero a la ruta, donde encontraron a la mamá de las nenas con un disparo en el abdomen.
Los investigadores presumen que el agresor se encontró en el hotel con la mujer, tuvo un ataque de celos, le disparó y luego fue a su casa, atacó a sus hijas y roció con combustible la vivienda para prenderla fuego. Pero no terminó ahí.
Mientras los agentes comenzaron a buscar al agresor, a quien identificaron como Mario G., de 58 años, recibieron otro llamado.
Alrededor de las once de la noche, un nuevo alerta a la Policía avisó sobre disparos de arma de fuego en inmediaciones de Julián Sosa al 700 donde se informó que además había un hombre herido de bala. El herido, cuya edad no trascendió, tenía tres disparos, uno en la espalda y dos en un brazo. Fue identificado como Jorge C. y tenía un revólver calibre 22 en su poder.
Una vez allí la Policía montó un operativo cerrojo y según informaron, comenzaron a recibir disparos desde un descampado. Los uniformados del Comando Radioeléctrico de Rufino repelieron la agresión, al mismo tiempo que debieron retener a los familiares del hombre herido quienes querían “ajusticiar” al tirador. Finalmente, le dispararon en una pierna y lograron desarmarlo minutos antes de la medianoche.
El detenido fue alojado en la Alcaidía de Melincué luego de recibir curaciones en un hospital.
Entre las medidas que ordenó la Fiscalía, la Policía allanó su domicilio donde secuestró una caja vacía de balas calibre 22.
Todos los heridos quedaron internados con pronóstico “estables” con excepción de la niña de diez años que debió ser traslada a Rosario para su mejor atención.
Además del fiscal adjunto del Ministerio Público de la Acusación, acutaron efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI) de Rufino y Venado Tuerto junto con Criminalística. También trabajó un equipo de políticas de género de la Municipalidad para brindar contención a las víctimas y a sus familiares.