El secretario de Seguridad Pública de la provincia Germán Montenegro y el secretario de Gobierno de la municipalidad de Rosario, Gustavo Zignago, encabezaron la reunión de la Mesa de Seguridad de Rosario este sábado para coordinar acciones con el municipio y la Policía en el marco de los últimos acontecimientos que tuvo como protagonistas a una empresa de turismo que venía pasajero de Camboriú y que intentó burlar los controles para prevenir la propagación de la pandemia del COVID-19 y de las detenciones de personas que estaban violando la cuarentena.
Entre las medidas que tomaron los funcionarios del gobierno provincial y municipal dispusieron que a partir de este sábado las empresas de transporte de pasajeros, incluidas combis y traslados desde aeropuertos, se remitirán únicamente a la estación terminal de Ómnibus de la ciudad de Rosario.
Allí todos serán controlados para evitar que los pasajeros que arriban de Aeroparque o Ezeiza, vayan a sus respectivos domicilios sin pasar por la revisión médica correspondiente.
Además, informaron a los titulares de esas empresas que ante la eventualidad de no cumplir con las órdenes, se procederá formular la denuncia.
En esta jornada, también dispusieron la localización de lugares de detención masiva por violación las normas de aislamiento seguro preventivo y obligatorio. Esta precisión busca evitar que los detenidos sean remitidos a las comisarías. Los lugares serán definidos por autoridades municipales y provinciales.
Asimismo se puso en conocimiento que el personal de la Policía de la provincia realiza permanentemente patrullaje en barrios con megáfono, advirtiendo a la población sobre las medidas a adoptar mientras dure el aislamiento.
De la reunión de la mesa de coordinación de esfuerzos ante la epidemia participaron el secretario de Prevención y Control Urbano de la provincia, Alberto Mongia, el subsecretario de Políticas Preventivas , Diego Llumá y el jefe policial de la Unidad Regional II del departamento Rosario, Danilo Villán.