El presunto asesino de Ulises Funes, acribillado el domingo a la tarde en la puerta de su casa de barrio La Lata, habría sido identificado y hasta anoche era buscado por la Policía. El crimen terminó de enlutar a una familia desmembrada a balazos por una disputa territorial con un clan rival de zona sur. Ulises tenía 23 años. Hace una semana, su papá fue atacado a balazos en la localidad de Alvear y se encuentra internado en grave estado. Su hermano menor está prófugo de la Justicia y a su mamá la mataron a tiros en marzo de 2016, en una esquina de Tablada, barrio en el que habían intentado refugiarse de la violencia. Ese crimen disparó una cadena de venganzas con unos 30 homicidios en la que un bando mostró más poder de fuego sobre el otro. Según los investigadores los lidera Alexis, uno de los hijos del Pimpi Camino, se asientan en barrio Municipal y están enfrentados a los Funes desde hace años, cuando los corrieron del Fonavi del Parque del Mercado.
A Ulises lo asesinaron alrededor de las siete de la tarde del domingo cuando llegaba a su casa junto a su novia y su hermana. Las balas salieron de un Fiat Siena color gris que se detuvo en la puerta del pasillo de Garay 1438, casi Corrientes. En el auto iban dos hombres y una mujer rubia, dijeron los investigadores. La cabeza y el torso de Ulises fueron blanco de múltiples balazos que le quitaron la vida al instante. La Policía busca a un hombre apodado “Cable” quien estaría identificado con nombre y apellido. Voceros del caso dijeron que en la zona del crimen, que investiga el fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos Florentino Malaponte, observaron dos cámaras de seguridad de una vivienda particular y de una empresa de recolección de residuos. Agregaron que el gabinete criminalístico de la Policía de Investigaciones (PDI) secuestró en el lugar cinco vainas servidas calibre 9 milímetros.
La familia Funes está sindicada como una de las que disputa territorio en la zona sur con Alexis Camino, hijo del Pimpi, ex jefe de la barra de Newell’s asesinado en 2010.
El clan estuvo en boga durante estos primeros días de 2018. El pasado miércoles, Rosario3.com publicó un video en el que Alan Funes, hermano menor de Ulises, celebró el Año Nuevo con una ráfaga de tiros al aire disparados con una ametralladora.
El 3 de marzo de 2016 la Justicia Federal desarticuló una banda que administraba seis búnkers en zona sur. En el operativo detuvieron a Rosa Caminos, hermana de Pimpi, y a gran parte de su familia. Ocho días más tarde, Mariela Miranda, mamá de Ulises, fue asesinada en Uriburu y Ayacucho de barrio Tablada. La Fiscalía imputó a Alexis Caminos y a Juan Manuel A. por este hecho, que se considera el inicio de una saga fatal que incluyó al menos 30 homicidios en 20 meses.
El Día del Trabajador, Eugenio Pupi Solaro fue asesinado cuando un encapuchado descargó una lluvia de balas en un pasillo de Ayacucho y Ameghino. Como consecuencia de los disparos, un nene de 11 años y un muchacho de 18 también terminaron heridos por los proyectiles y quedaron en grave estado. Por esta balacera fue demorado Ulises, y luego liberado por falta de pruebas ya que, según testigos, no fue el autor de los disparos. En cambio Alan cumplió arresto domiciliario por este crimen hasta esta semana, que se ordenó su captura luego de que se filtrara el video donde dispara al aire.
Los Camino y los Funes convivían en barrio Municipal pero en 2013 la armonía se rompió. Funes denunció a Alexis, y a sus tíos Rosa y Tato, por amenazas e intento de usurpación. Ello derivó en la mudanza de los Funes a Tablada luego de algunos tiroteos. A partir de allí los hijos de Funes tomaron el control, con Lamparita (hijo de Jorge Funes pero no de Miranda) a la cabeza. En marzo de 2016 mataron a Miranda, hecho por el que están imputados Alexis Caminos y Juan Manuel A., alias Juanchi. Ese día, Jorge Funes también quedó vinculado a una causa penal cuando en el Hospital Roque Sáenz Peña había dos muchachos heridos que pensaron eran los atacantes. Cuando la policía los trasladó a la comisaría, Funes siguió al móvil policial y exhibió un arma, por lo que terminó preso.
Según una declaración de Jonatan, otro de sus hijos, “el problema con los Camino empezó en 2012 y 2013”. “Mis hermanos Alan y Ulises iban a la escuela. Para llegar tenían que pasar por el barrio Municipal. En ese barrio, la familia Camino controlaba todo lo que pasaba. Ellos querían que mis hermanos sean sus sicarios y empiecen a matar gente para ellos. Empezaron a verduguearlos, le pegaban cachetazos y les mostraban armas. Ulises tenía 16 y Alan cerca de 12, ellos querían que mis hermanos maten a los que habían matado a su padre, de la banda de los Ungaro”, detalló el joven. Dijo que su padre se enojó y enfrentó a Alexis y sus soldados.
Los Miserables
En mayo de 2017 un megaoperativo de la Policía Federal se llevó adelante contra el clan Funes. Detuvieron 8 personas pero ninguna miembro de la familia. Finalmente cayó Lamparita en septiembre de ese año. Para la fiscal provincial Gisella Paolicelli, Lautaro Lamparita Funes es el organizador de una asociación ilícita dedicada a cometer distintos delitos contra la propiedad, la libertad y la integridad y su grupo está integrado por: Marcelo Ezequiel G. alias “Pala”, José María C., Miguel Ángel P., Milton C., Héctor C., Joan Patricio K., Liliana G., Andrea S., Matías alias “Mojarra” y Carlos F. alias “Pelo Duro”, éste último detenido en una casa en Funes el pasado 30 de diciembre. También le imputó un homicidio.
En aquella audiencia, la fiscal explicó que la organización delictiva tiene tres ejes: apoyo para “resolver” problemas territoriales de la venta de droga en el barrio; usurpación de departamentos para poner puntos de venta; y también escruches y robo a vehículos en la calle. Y agregó que de las escuchas telefónicas surgió que el grupo hacía inteligencia previa para cometer “entraderas”. Su lugar de encuentro era Berutti entre Pasco y Cochabamba. Se hacían de autos, les cambiaban la patente y los usaban para intercambiarlos por armas de fuego. En la operación estaría vinculado Jorge Funes y José Manuel C. alias “Josema”, aseguró la fiscal, aunque hasta el momento el padre de la familia no fue imputado. Ahora Funes lucha para recuperarse del ataque a tiros.
El barrio La Lata, un nuevo territorio en conflicto
El 10 de noviembre pasado Javier Gaitán salió a las dos de la tarde de la cárcel de Piñero, como cada sábado. Esta vez lo pasaron a buscar en un Fiat Palio otros tres hombres. Cuando el auto que él mismo conducía había hecho unos pocos kilómetros por la ruta A012, y estaba a medio camino entre las rutas 14 y 18, en dirección a Rosario, desde otro vehículo llovieron balas. Cuando todo terminó en el auto quedaron tres cadáveres y un joven con un tiro en la cabeza. Hipótesis en danza hay muchas, como un conflicto al interior de la prisión o bien disputas externas por el control del territorio, tal vez por drogas. Una línea investigativa sostiene que Gaitán compartía la celda con René, a quienes le atribuyen el mando del grupo rival a los Camino. Y este ataque fue leído por los investigadores como un freno hacia el avance sobre La Lata, de donde eran oriundos los jóvenes asesinados. En ese barrio aanteayer asesinaron a Ulises Funes a balazos.
Imputado por tirar con una metra en Navidad
Tiene 23 años, es amigo de Alan Funes y quedó detenido tras una llamada al 911. Una comunicación telefónica informó que un pibe estaba a los tiros, la madrugada del domingo, en zona sur. Leonardo Marcelo V. ya había sido detenido la semana pasada con un arma de uso civil, aunque luego de la imputación en Fiscalía recuperó la libertad. Ahora no tuvo la misma suerte. En una audiencia oral, el fiscal Mariano Ivaldi Artacho lo sindicó como autor del delito de tenencia compartida de arma de fuego de uso civil y encubrimiento. El juez Luis María Caterina dictó la prisión preventiva en su contra por 60 días. Su imagen se viralizó la última Navidad cuando apareció en un video, junto a Alan Funes. Éste último con una ametralladora realizaba disparos al aire. Éste hecho le valió la pérdida del beneficio de arresto domiciliario que había logrado en octubre pasado.
Alan Funes apareció en un video disparando una ametralladora la noche de Navidad; junto a él estaba un muchacho de remera blanca, a quienes los investigadores sindican como Leonardo V. La semana pasada fue detenido con un arma de uso civil y, como no tenía antecedentes, se le inició una causa en Fiscalía y recuperó la libertad. Pero el domingo a la madrugada la policía lo arrestó con un arma de grueso calibre tras un patrullaje. Un llamado al 911 alertó la presencia de un hombre que hacía detonaciones con un arma. El fiscal Ivaldi Artacho lo imputó en una audiencia oral frente al juez Luis María Caterina y quedó preso hasta el 7 de marzo próximo.
Alan es uno de los miembros de los Funes enfrentado a los Caminos por una lucha territorial. Estaba detenido en el IRAR por el crimen de Eugenio Pupi Solaro, en mayo de 2017. En octubre logró un arresto domiciliario por acuerdo de partes, pero la violó cuando tomó una ametralladora y se filmó disparando. Ahora la jueza de Menores María Dolores Aguirre Guarrochena revocó el beneficio y Alan está prófugo.
