El serbio Novak Djokovic, segundo favorito, derrotó en dos sets al español Rafael Nadal, número 1 del mundo, y se llevó el título del Masters 1000 de Miami, disputado en el complejo Crandon Park de Key Biscayne.
Djokovic sumó su segundo campeonato consecutivo (dos semanas atrás había festejado en Indian Wells), tras imponerse con parciales de 6-3 y 6-3, al cabo de una hora y 24 minutos de juego.
De este modo, el serbio achicó a cuatro partidos (18-22) la estadística personal que mantiene con el mallorquín, quien no pudo ganar ninguna de las cuatro finales que sostuvo en el certamen de la Florida.
En el primer set, Djokovic aprovechó la instancia de quiebre que tuvo en el 3-2 a su favor y así enderezó el segmento, apoyado en su sólido servicio.
En el segundo capítulo, el dominio del serbio se acentuó, tras romperle el saque a poco de comenzado el parcial.
Nadal no tuvo la habitual potencia en sus devoluciones y tampoco obtuvo réditos con su servicio.
Por ende, Djokovic solamente se dedicó a conservar su saque para consolidar la superioridad y quedarse con el triunfo ante un oponente al que había batido en las dos anteriores ocasiones en las que ambos se enfrentaron: finales de Beijing y Masters de Londres 2013.