Conseguir un nueve en el fútbol argentino cuesta horrores. Y para Newell’s, que no juega Copa, tiene la billetera con pocos recursos y además acarrea la mala prensa que tiene Rosario por estos días se hace casi imposible.
Desde el inicio del mercado de pasee Sanguinetti puso como prioridad traer un centrodelantero. Un jugador de jerarquía que garantice goles. Y enseguida armó una lista de candidatos, que se fueron cayendo por distintos motivos.
A Agustín Fontana le reventó el celular a llamados, pero el ex Banfield prefirió irse a Defensa y Justicia porque “su familia no quería venir a Rosario”. Tampoco la dirigencia pudo convencer a Cristian Tarragona, que optó por ir a Gimnasia; mientras que Sebastián Sosa Sánchez coqueteó con todo el que se le cruzaba en el camino y al final optó por Vélez, con una mejor oferta económica y deportiva. Y el uruguayo Silvera –goleador del torneo charrúa- se fue a México con una oferta imposible de igualar.
A medida que se fueron descartando nombres, el DT leproso presentó nuevas opciones, pero la historia parece repetirse.
Franco Soldano, a préstamo en Fuenlabrada de la segunda de España, aún no decidió dónde jugará, pero si viene a Argentina será en Talleres que juega Libertadores o en Huracán donde dirige Kudelka.
También se pensó en Wanchope Ábila, pero negociar con el Consejo de Fútbol de Boca es un problema. Y hubo ciertas referencias que recibió Sanguinetti sobre el jugador que hicieron que desista de esa misión compleja.
En ese contexto, el paraguayo Luis Amarilla y el ecuatoriano Djorkaeff Reasco aparecían como los nombres a intentar convencer, pero una vez más las gestiones no tuvieron éxito.
Newell’s ofreció cerca de un millón de dólares por el 50% del pase de Reasco, un nombre que acercó un intermediario ya que el juvenil atacante aún no renovó su vínculo con Liga de Quito.
Pero la Lepra se encontró con dos negativas. Liga no aceptó el monto ofrecido, y el propio jugador no quiere venir ahora a Argentina, ya que considera que quedándose en Ecuador tendrá más chances de convencer a Gustavo Alfaro de citarlo al Mundial.
Descartado Reasco, otra vez a recalcular, ya que Vélez sigue sin responder por la oferta de 1,3 millón de dólares por el 50% de Amarilla, y si bien el tiempo en este caso juega a favor de Newell’s (Amarilla regresará de su convocatoria de la selección y no va a entrenar con Vélez), Sanguinetti no quiere esperar mucho más.
Por ese motivo, el entrenador analiza otras opciones, y en las próximas horas charlará con Julio Saldaña e Ignacio Astore para proponerle alguna alternativa.
Lo cierto es que a una semana del inicio del torneo. El nueve no llegó. Sanguinetti pudo sumar a Juan Manuel García, un atacante que puede pararse de centrodelantero, aunque la realidad es que llegó como segunda opción.
Y en el amistoso del viernes ante Unión, es probable que el DT vuelva a probar con Ramiro Sordo, quien respondió con goles en los dos ensayos previos y hoy aparece como gran candidato a iniciar ante Defensa y Justicia, increíble pero real.
