En las últimas horas se conoció que el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, llamó a “discutir” en el Congreso una nueva Ley de Alquileres que brinde «certezas» al propietario y «garantías y tranquilidad» al inquilino, al advertir que «fracasó» la norma sancionada en 2020.
Ariel D’Orazio, referente del Consejo Asesor de la Vivienda Única de Rosario, salió al cruce y en declaraciones a El Ciudadano y afirmó: “No conocemos a qué se debe la postura de Massa de calificar de fracaso, ya que ninguna organización de inquilinos tuvo reuniones con el ministro de Hábitat para llevarle una propuesta”. Y agregó: “Todo lo que cuestiona es en base a un informe de Zona Prop, clasificados de Clarín, y son los mismos datos que discuten inmobiliarias y propietarios”.
Con respecto a la ley vigente, el referente de la organización de inquilinos explicó que el Estado no garantiza su cumplimiento. “Inmobiliarias hacen firmar contratos por un año o no alquilan, nosotros pedimos a los inquilinos que denuncien esto en Afip”. Además, contó que los incrementos anuales rondan más del 50 por ciento y las renovaciones de contrato se dan con incrementos de entre 60 y 110%.
D’Orazio aclaró que “saben que tienen que haber cambios en la ley de Alquileres, pero el Estado debe ampliar la regulación porque desde algunos sectores, como los colegios de corredores inmobiliarios, pretenden aumentos cuatrimestrales o semestrales”. “¿Van a reformar la ley y poner tope a los aumentos, van a multar a los que pongan aumentos impagables, van a cobrar impuestos a la vivienda ociosa?”, preguntó.
En Argentina hay 9 millones de inquilinos y tres millones de hogares en alquiler. En Rosario, el déficit habitacional es de 50.000 viviendas. “Nosotros esperamos que alguien del Estado se reúna con las organizaciones de inquilinos, el ministro (de Desarrollo Territorial de Nación, Jorge) Ferraresi asumió hace 13 meses y nunca llamó nadie”, se quejó D’Orazio.
En gran parte de Europa están las viviendas públicas de alquiler. Sin embargo, el referente de los inquilinos sostuvo que “en Argentina tenemos políticas de un país bananero, no hay discusión, no hay convenios con los gremios para la construcción de viviendas. “Para el sector político, la presencia del Estado termina en Capital”, concluyó.
Otra mirada
Andrés Gariboldi, presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario, consintió la expresión de Massa: “Sin dudas, la ley fue mala para propietarios, inquilinos y corredores”. Y describió el cuadro: “Hoy, quienes buscan alquilar inmuebles para vivir no los encuentran porque la oferta disminuyó notablemente. Las características de la ley (el plazo de alquiler y la actualización del monto a pagar sólo una vez al año) hicieron que los propietarios lleven los inmuebles al mercado de ventas”.
“En 2018, con línea de créditos hipotecarios, alquilar demandaba entre 90 y 120 días. Hoy, entre 15 y 20 días; prácticamente, cuando aparece un algo para alquilar, al dueño se lo sacan de las manos”.
Por último, Gariboldi explicó la actualización de contrato. “En los últimos doce meses, la inflación fue del 52 por ciento, lo cual es un impacto muy grande para lo que debe pagar un inquilino. Hay que encontrar puntos de equilibrio, porque con ese porcentaje, hacer un contrato por 36 meses con una actualización de una sola vez al año, también perjudica al propietario”, concluyó.