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Dos hermanos enfrentan un pedido de prisión perpetua por un homicidio ocurrido en 2018

Eran tres hermanos los acusados, uno falleció. Para la fiscalía fueron a la casa de la víctima, que estaba en arresto domiciliario, a amedrentarla con armas. Luego volvieron y se agarraron a los tiros. Chicho Candia recibió dos balazos y murió rumbo al hospital

Dos hermanos van a juicio oral y público por el crimen de Enrique «Chicho» Candia. Un hombre que se encontraba en arresto domiciliario y enfrentó a los tiros a sus agresores en diciembre de 2018. Eran tres los acusados, todos hermanos, pero uno de ellos murió. Ahora los otros dos enfrentan un pedido de prisión perpetua por el delito de homicidio calificado.

Enrique Alberto «Chicho» Candia tenía 27 años, estaba preso en su casa por una investigación enmarcada en un contexto de violencia de género cuando el mediodía del 22 de diciembre de 2018 tres personas llegaron hasta un departamento ubicado en un Fonavi Guereño, ubicado en Mármol y Obligado, de Villa Gobernador Gálvez. Los atacantes amenazaron a Chicho de muerte y con armas en las manos le exigieron que saliera de la vivienda.

Unas horas más tarde, el trío regresó y comenzó a disparar contra el frente del domicilio de Chicho, contó la fiscal del caso Marisol Fabbro.

La víctima salió de la casa con un arma y contestó la agresión a los tiros. En ese enfrentamiento, Chicho recibió dos plomazos, uno en el tórax y otro en el brazo. Llegó sin vida al hospital Gamen de la vecina localidad.

Esa tarde, Abel Leguizamón llegó con lesiones a la guardia del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) y quedó internado. Una de las versiones fue que antes de intercambiar plomos se habían agarrado a las piñas. Poco después fue involucrado en el homicidio y quedó con custodia policial.

El 2 de febrero de 2019 tras algunos allanamientos cayó Alejandro Jonatan Leguizamón y fue imputado por la fiscal Fabbro por el crimen. El último de los hermanos fue arrestado ese mismo mes en el Fonavi Guereño, el mismo donde vivía Chicho, cuando un llamado al 911 alertó sobre un herido.

La víctima fue identificada como Lucio R. y, según algunos testigos, el agresor era el mismo que se encontraba prófugo por el crimen de Chicho. Los uniformados hicieron una recorrida por el complejo habitacional y dieron con Carlos Javier Leguizamón, quien marchó preso.

Los tres hermanos fueron imputados por el crimen pero sólo dos llegaron al juicio. Abel murió, aunque no trascendieron las circunstancias de su deceso. Este lunes, los hermanos Alejandro y Carlos Leguizamón se sentaron en el banquillo de los acusados.

La fiscal Fabbro pidió prisión perpetua para el dúo por el delito de homicidio calificado por haber sido cometido con el concurso premeditado de dos o más personas y agravado por el uso de arma de fuego, amenazas calificadas por el uso de arma de fuego y portación ilegítima de arma de fuego de uso civil. El debate es presidido por los jueces Nicolás Foppiani, José Luis Juárez y Pablo Pinto.

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