Dos internos de la Unidad Penitenciaria Nº 6 escaparon en el mediodía de este viernes tras pasar el cerco perimetral y saltar el tapial que da al pasaje Julio Marc. La fuga se registró en la cárcel ubicada en el predio de avenida Francia al 4800 y lindera al edificio de la Jefatura de Policía la Unidad Regional II, del Departamento Rosario, que está por Ovidio Lagos.
De acuerdo con voceros relacionados al caso, este viernes a las 12.10 los vecinos alertaron al 911 que había dos hombres que ganaron la calle tras superar un paredón de unos tres metros, en un espacio donde practicaban deportes. Esta persona aportó que la dupla saltó por Julio Marc, corrió unos metros hasta Suipacha y se perdió en dirección a avenida Uriburu. Los policías avisaron a la autoridades del Servicio Penitenciario, quienes ordenaron cerrar el penal y a las 12.15, es dato fue corroborado tras un conteo.
Según confirmó el subsecretario de Asuntos Penitenciarios del Ministerio de Gobierno y Justicia, Jorge Bortolozzi, en declaraciones a LT8 y los fugados fueron identificados como Fernando Bordón, de 28 años y con domicilio en zona noroeste, y Luciano Rodríguez, de 27, cuyo último domicilio fue en la localidad bonaerense de Pergamino.
Estos internos estaban en el campo de deportes cuando se descompuso otro preso, describió. El funcionario estimó que esta circunstancia podría tener que ver con la fuga. El profesor de educación física lo llevó a la enfermería, lo que generó una distracción que aprovecharon los dos internos para fugarse por pasaje Marc.
Bortolozzi dijo que en el caso trabaja el personal de la División Judiciales y Agencia de Control Policial (ex Asuntos Internos) y que notificaron la fuga a la fiscal de Flagrancia María de los Ángeles Granato, quien ordenó las medidas de rigor como la toma de testimonios, el relevamiento de cámaras, el secuestro de celulares del personal penitenciario, la toma de fotografías. A lo que sumó que el personal penitenciario encargado de la seguridad de ese sector fue pasado a disponibilidad y se le abrirá un sumario.
Respecto a los internos, el funcionario explicó que Luciano Rodríguez estaba a un paso de la libertad condicional, la que recuperaría el próximo 18 de octubre. Había sido condenado en octubre de 2018 por lesiones dolosas agravadas por relación preexistente y en contexto de violencia de género, tenencia de arma de fuego de guerra, abuso de armas y robo calificado.
Dijo que es difícil saber qué le pasa por la cabeza un interno que está a punto de obtener la libertad y decide fugarse aunque explicó que le preocupa más el otro interno, en referencia a Fernando Bordón, quien tiene un proceso abierto por robo y privación de la libertad.
“Lo que hay que revisar es la actitud de los centinelas que entiendo es totalmente ineficiente”, reparó y también dijo que probablemente refuercen la salida al campo de deportes y profundizarán las instrucciones a los profesores de educación física para que sepan cómo actuar.
Bortolozzi aseguró que la cárcel “no es una escuela ni un jardincito de infantes. Cuando sacan a deportes a internos tienen que extremar las medidas, los cuidados y todo esto se va a determinar con el sumario que corresponde”, aseguró
Ante la consulta del conductor José Maggi respecto a la posibilidad de una vinculación de este hecho y los reclamos que penitenciarios por mejores condiciones laborales. El subsecretario de Asuntos Penitenciarios estimó que no tendría vinculación. Dijo que están en tratativas y con buena predisposición desde Poder Ejecutivo para dar respuesta.
«Por supuesto, nunca se descarta nada», dijo pero entendió que, en principio, este caso no tiene que ver con un reclamo y es un hecho aislado.
En tanto, el secretario del Servicio Penitenciario Provincial (SPP), Walter Gálvez, dijo a la agencia de noticias Télam que tanto el profesor de educación física como los dos encargados de las garitas de vigilancia “fueron pasados a disponibilidad”.
Gálvez aclaró que los evadidos “son presos comunes, no de alto perfil, por eso están en la UP6, no son peligrosos ni mucho menos” y añadió que los tres empleados mencionados fueron pasados a disponibilidad porque sus conductas fueron “de una desidia absoluta”.