Una fiesta de 15 tuvo un trágico final ante anoche cuando los invitados se enfrentaron a los tiros contra un grupo de personas ajenas a la celebración, que se desarrollaba en una casa de las vías de Gálvez al 5000, en la zona oeste. Como consecuencia de la balacera, un chico de 17 años falleció de un tiro en el tórax, un muchacho de 26 años murió en el Heca mientras lo operaban por un disparo en el abdomen y un tercero recibió un plomo en la mano. Los vecinos, familiares del menor de los fallecidos y los investigadores hablan de un enfrentamiento pero brindan versiones dispares de cómo se sucedieron los hechos y qué rol cumplía cada uno de los presentes.
“No estaba en el cumpleaños. Fue al quiosco a comprar una gaseosa y le pegaron un tiro en el pecho”, dijo con los ojos llorosos Ricardo, padre de Daniel Ramón Izaguirre, de 17 años, mientras recibía a la gente que llegaba para despedir los restos del chico en la cochería Copeto, de Matienzo 3368.
“Estaba dormido cuando me avisaron. Dani, como lo llamaban sus conocidos, estaba en la casa de su cuñada junto con otras personas y la fiesta era enfrente”, agregó Ricardo, mientras una muchacha se acercaba para aportar más datos a su relato.
China es familiar de Dani y anteanoche también estaba reunida en la vivienda que queda en frente de donde ocurrió la celebración. Entre sollozos ahogados, la chica contó que cerca de las 23.30, Dani salió solo a comprar una gaseosa al quiosco que está a un par de casas. Cuando volvía, un grupo de jóvenes del barrio comenzó una balacera contra los invitados del cumpleaños de 15, quienes respondieron el ataque. “Por curiosear nos pasó. Escuchamos los tiros y salimos todos a ver. Dani se quedó parado y le pegaron el tiro en el pecho. Los que lo mataron fueron los invitados a la fiesta porque los otros –quienes según las versión de la joven estaban en medio de las vías– tiraban para el lado de la casa y él estaba enfrente”, recordó la muchacha, para luego agregar que la víctima fatal, que trabajaba como limpiavidrios, terminó de construir hace poco su vivienda, la cual compartía con su mujer embarazada de 4 meses, y que no veía la hora de cumplir los 18 años para ir a trabajar en la misma empresa que lo hace su papá.
Como consecuencia de la reyerta, también murió Alejandro Domínguez, de 26 años, quien estaba participando de la celebración. Es que, durante el tiroteo, el muchacho recibió un tiro en el abdomen y falleció mientras era operado en el Heca.
Además, Darío L., de 20 años, terminó con una herida de arma de fuego en una mano y al cierre de esta edición se encontraba fuera de peligro, quien según la familia de Dani también estaba en el festejo.
“¡Son unos asesinos! ¿Cómo van a ir a una fiesta todos enfierrados? Estamos cansados de denunciar los tiroteos que pasan en las vías por culpa de los transeros”, dijeron allegados al pibe asesinado.
Sin embargo, las fuentes policiales brindaron una versión diferente a la que expusieron ayer a la tarde los familiares de Izaguirre, y sostuvieron que el o los homicidas no están identificados.
Los investigadores dijeron que el adolescente junto con el joven que resultó herido en la mano fueron los que comenzaron a discutir con los desconocidos que venían por las vías.
Según las fuentes, la fiesta de 15 se desarrollaba en el patio delantero de una vivienda que la familia de la cumpleañera había alquilado a unos vecinos para la celebración. El dueño de esta casa dijo a los investigadores que el enfrentamiento ocurrió pasadas las 23 de anteayer cuando dos chicos, entre los que se encontraban Dani y el herido en la mano, caminaban hacia el quiosco para comprar una gaseosa y se cruzaron con tres desconocidos que pasaban por las vías. En ese instante, los jóvenes y el trío empezaron una discusión que terminó en la fatal balacera entre estos últimos y los invitados a la fiesta. “Nadie pudo aportar cuál fue el móvil por el cual los invitados decidieron intervenir a los tiros en la gresca. Se puede pensar que fue para defender a los dos que iban al quiosco”, deslizó uno de los pesquisas.
A su vez, seis jóvenes que estaban ayer en Gálvez y Felipe Moré coincidieron en que el chico de 17 años no tenía nada que ver, pero resaltaron que el tiroteo fue entre dos bandas.
En el lugar se secuestraron 4 vainas calibre9 milímetrosy 3 calibre 32.
El hecho es investigado por el Juzgado de Instruccón de la 3ª Nominación, con la colaboración de la comisaría 19ª yla Brigadade Homicidios dela URII.
