Economistas coincidieron hoy en que el Gobierno debería tomar medidas urgentes para combatir distorsiones que afectan el crecimiento del país, en especial, la inflación, pero estimaron que pese al revés electoral sufrido por el kirchnerismo este domingo, la convalecencia de la Presidenta postergará cualquier decisión.
Para Fausto Spotorno, economista jefe del estudio Orlando J. Ferreres & Asociados, el resultado de los comicios demostró que el oficialismo «ya no tiene el apoyo que tuvo en 2011» y que «oportunamente» generó que la mandataria Cristina Kirchner tome «medidas heterodoxas, como el cepo cambiario».
«El mensaje que dejó la elección es que si bien te apoyamos en el 2011, no fue para hacer cualquier cosa, y ahora habrá que ver la interpretación del Gobierno, ya que tiene que tomar medidas», advirtió Spotorno.
Cepo al dólar, generación de empleo genuino, atracción de inversiones, fortalecimiento del comercio exterior y en especial inflación, que rondaría el 26 por ciento anual, encabezan la nómina de desafíos económicos prioritarios que la administración nacional debería afrontar en el corto plazo tras el revés en las urnas, según especialistas.
De todos modos, la convalecencia de Cristina, que se recupera de una operación en la cabeza que incluso le impidió votar este domingo y la mantendría en reposo al menos entre 10 y 15 días más, postergaría cualquier decisión del Gobierno, consideraron los economistas Jorge Todesca, jefe de la consultora Finsoport, y Abraham Gak, director estratégico del Plan Fénix.
«Hoy el Gobierno está afectado por la enfermedad de la Presidenta y no está tomando decisiones en ningún campo. El conjunto de funcionarios del área económica menos aún, porque no hay una dirección de un equipo económico y no parece que exista un equipo económico como tal», sostuvo Todesca en declaraciones a Noticias Argentinas.
El exviceministro de Economía dijo que «los acontecimientos económicos no se van a detener porque el Gobierno se detenga» y agregó: «Yo creo que lo que va a predominar es que sigan las decisiones del Gobierno de igual modo como las hemos visto hasta ahora, aplicando tapones y torniquetes, ahora matizados con algunas idea acotadas».
Se expresó a la flexibilización del ingreso de divisas al país, una medida que «frente a la diversidad del deterioro, difícilmente pueda compensar la declinación de la economía y en especial de las reservas internacionales», con su goteo constante.
Todesca consideró que «va a continuar la tensión cambiaria» y añadió: «En cuanto al cepo, no creo que el Gobierno instrumente medidas para salir, porque eso requiere un plan económico global y lo veo al Gobierno muy lejos de poder formularlo, tendría que modificar incluso sus ideas. No lo veo».
Gak, por su parte, aventuró que podrían producirse cambios en las políticas económicas, pero no serán inmediatos: «Si va a haber un tipo de medidas, van a tardar un poco. No se van a poner en práctica antes de que retome la Presidenta sus funciones», manifestó.
«Las cámaras (en el Congreso) van a quedar más o menos igual a como están, no va a haber cambios de mayorías. No veo razón para que haya cambios extraordinarios. Aunque, sí, presumo que alguna cosa van a hacer para enfrentar esta cuestión cambiaria», agregó el economista y docente.
Estimó que «puede ser que haya algún mecanismo para volver a captar lo que están vendiendo los turistas y reducir la demanda externa. No es posible saber si van a fijar un dólar diferente o habrá una selección mayor en materia de importaciones de productos que no sean de capital».
«Imagino que la inversión de capital seguirá siendo prioritaria para el Gobierno. Y, también, que van a mantener el ritmo de devaluación actual, que no es para nada menor», opinó Gak en declaraciones periodísticas.
Spotorno acotó que «la economía muestra tensiones que hacen requerir medidas, producto de la suba del dólar paralelo, la caída de reservas, el crecimiento exiguo y el crecimiento pobre del empleo y la inversión».
«Y la elección generó que se postergaran decisiones en la Argentina, no tanto por el resultado sino por su existencia», dijo el economista.