El abogado de Elián Ángel Valenzuela, conocido como L-Gante, solicitó este lunes el cese de la detención del músico al incorporar a la causa un video en el que ve al denunciante subir al vehículo conducido por el joven y que, para la defensa, demostraría que no fue obligado, aunque para los investigadores esta nueva prueba no modifica la imputación por amenazas y privación ilegal de la libertad del cantante de Cumbia 420.
Fuentes judiciales confirmaron a Télam que el abogado de L-Gante, Alejandro Cipolla, presentó este lunes ante el Juzgado de Garantías 2 de General Rodríguez, a cargo del juez Gabriel Castro, el pedido de cese de detención para el músico.
Cipolla incorporó un registro fílmico en el que, según indicó en su presentación, el denunciante, Gastón Torres, vecino de la familia de Valenzuela, subió a la camioneta BMW que conducía Valenzuela “en el marco de una discusión en la que claramente no se registran señales de temor por parte de ninguno de los presentes”.
“Sin dudas que lo apreciado en el video que se incorpora, da por tierra con la descripción fáctica realizada por la Fiscalía en la que permanentemente se alude al «fundado temor» que provocaba la actitud amenazante mediante la utilización de una supuesta arma de fuego por parte de Elián”, expresó Cipolla en el escrito.
Para el defensor, los testigos que declararon que Valenzuela amenazó a con armas de fuego “faltaron a la verdad con el claro fin de involucrar” a su representado “en un hecho que a todas luces no ha existido tal como le fuera imputado”.
Sin embargo, una fuente judicial ligada a la causa que lleva adelante la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 9 de Moreno-General Rodríguez dijo a Télam que las imágenes incorporadas este lunes a la causa por la defensa “no cambian el curso de la investigación” y que las mismas “condice con el relato de la víctima”
“La prueba se analiza en conjunto. La víctima en su relato dice que L-Gante lo amenaza desde el interior del vehículo y así también exponen resto de testigos. La amenaza con arma no determina la privación de la libertad”, aseguró un pesquisa.
En tanto, el músico realizó una serie de posteos en su perfil de la red social Instagram en los que publicó tres cartas escritas por él de puño y letra.
“Si no salgo ganando prefiero no salir. Diego Crónica, tenés razón. Para muchos soy más que un grano”; “Me encanta escuchar a Sigal (Leonardo, el abogado del denunciante) en vivo. Jaja. Tiene menos chamu. Jajaja. Los turros te dan vuelta la tortilla”, y “Gracias el aguante. Yo toy re piola. Descansando. Nos vemos pronto y mejor que nunca. C-420. Celda 4″; fueron los mensajes difundidos desde la cuenta personal del cantante.
L-Gante está detenido desde el martes de la semana pasada en la sede de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes como acusado de los delitos de “privación ilegítima de la libertad, en concurso ideal con amenazas coactiva agravadas por el uso de armas y por perpetuarse contra un miembro del poder público»; «privación ilegítima de la libertad en concurso ideal con amenazas coactivas agravadas por el uso de arma»; y «tenencia simple de estupefacientes en carácter de autor».
El pasado jueves, Valenzuela declaró ante la fiscal Raúl Villalba de la UFI 9 de Moreno-General Rodríguez, donde negó los cargos pero no contestó preguntas de la fiscalía.
«Dio una explicación detallada. Explicó todo. Dio detalles y aportó pruebas de video», indicó el abogado defensor Cipolla.
El abogado dijo que L-Gante sí respondió a sus preguntas y explicó que los hechos fueron consecuencia de «unos problemas que hubo en la puerta de su casa», en los que se produjeron «disparos, de no se sabe quién» y que todo transcurrió «antes» de que el músico llegara al lugar.
La denuncia que derivó en el arresto del cantante fue realizada el 27 de mayo último por Torres, vecino de la familia de Valenzuela, que reside en el barrio Bicentenario de General Rodríguez, en el oeste del conurbano.
Según las fuentes, la mañana de ese día, a la salida del local bailable «Río» ubicado en esa localidad, hubo un incidente con varios jóvenes integrantes de la denominada «La Mafilia», el grupo de amigos y músicos al que pertenece L-Gante.
Cuando Torres se retira del boliche para dirigirse a su casa, comenzó a recibir amenazas por parte de Valenzuela: «Te metiste con La Mafilia, te metiste con la 420, ya vas a ver lo que te va a pasar», le dice, según contó el abogado del denunciante, Leonardo Sigal.
Tras ello, siempre según la denuncia, integrantes de ese mismo grupo fueron hasta su casa y lo agredieron físicamente tanto a él como a su familia y luego pasó un BMW blanco conducido por Valenzuela, que bajó el vidrio, le apuntó con un arma y subió al auto a Torres.
A los pocos metros, también fue interceptada y obligada a subir al mismo rodado una joven, vecina del músico, que había participado de la primera discusión con los amigos de L-Gante, según la denuncia.
Luego y siempre según los dichos del abogado denunciante, algunos integrantes de «La Mafilia» fueron demorados por la policía y L-Gante regresó hacia donde estaba el móvil, bajó el vidrio y les dijo a los agentes: ‘Largame a los pibes o a éste te lo mato'», en referencia a la víctima que estaba retenida dentro de su BMW).
En ese momento, de acuerdo a la denuncia, el cantante de la Cumbia 420 llamó a otra persona al que identifica con un apodo y le dice: «Preparame el campito que a este perejil lo matamos ahí».
Torres permaneció 23 minutos cautivo, hasta que L-Gante recibió una llamada en la que le aseguraban que sus amigos habían sido liberados por la policía y liberó a las víctimas.