La escuela Nº 1032 La Argentina paró sus actividades para disfrutar del partido entre Argentina y Croacia. Aún entre las banderas y el decorado de los actos por el día de la bandera, el patio se colmó de camisetas albicelestes (casi todas de Messi), caras pintadas y banderas. Todos se vinieron preparados. La consigna era traer algo que les guste para alentar al equipo de Sampaoli.
Según contaron los maestros, vienen preparándose hace días, hablando con los chicos de los sentimientos que se generan en un partido, de los valores, de la patria y de los países.
«Vamos, vamos, Argentina… vamos, vamos a ganar que esta banda de la escuela no te deja no te deja de alentar», fue el cántico que más se escuchó en el colegio de Sarmiento al 4200.
Pero todo cambió con el correr de los minutos y los goles de los croatas. «Ya perdimos la esperanza», dicen algunos y se van a jugar a otra cosa. Otros siguen firmes aunque ya no cantan. Marianella ya terminó de pintar las caras de sus compañeros y Matías explica porqué es importante el partido…
Antes que termine el partido ya estaban todos preparados para volver al aula. Algunos llorando, otros enojados… el último gol fue el que marcó que empiecen a desarmar, a subir y a seguir con las clases…
Escuela tradicional y centenaria
“Esta es una escuela centenaria, tradicionalmente los partidos de Argentina siempre se ven, es una tradición y este año no podía ser diferente”, dijo María de las Nieves González, directora de la escuela La Argentina ubicada en el corazón del barrio Domingo Matheu, en la zona sur de Rosario. El jueves los alumnos se reunieron en el patio de la escuela y más allá de la decepción del resultado lo importante fue compartir el momento. «Trabajamos antes de cada partido y después. No podemos negar que es lo que nos pasa a todos los argentinos y que la escuela no puede estar al margen. Estamos hablando que enseñamos en contexto y éste es un contexto», contó González.
“Esta es una escuela tradicional pero vemos que estamos en una etapa de cambio, estamos en la transición de intentar dar respuesta a estas nuevas infancias, a las necesidades que traen los niños sin dejar de lado todo aquello que nos sirvió y que nos sigue sirviendo actualmente», agregó la docente. Y continuó: «Los chicos tienen mucha información, entonces tratamos de encontrarle un sentido a todo ese conocimiento que traen».
«Vamos a trabajar la tristeza», dijo la directora una vez concluido el partido. Es que La Argentina busca articular el partido, el Mundial, con los contenidos de las distintas asignaturas. «Tratamos que el partido de fútbol no sea sólo un partido, sino llegar a los valores que lo sostienen y para eso tenemos diferentes proyectos», explicó.
«Tercer grado hizo un «emocionario» donde trabajamos las emociones que nos despierta el fútbol como el amor por la camiseta y el amor por la Patria, la sensación de ganar y la de perder, el trabajo en equipo», graficó la directora al tiempo que María de Luján Suárez, la vice, explicó que también que, entre otros, se está realizando un proyecto de matemática sobre el Mundial y de geometría, que tiene que ver con las banderas de los países que participan.
Los contenidos se trabajan de forma transversal, basados en Núcleos Interdisciplinarios de Contenidos. «La idea es que este proyecto (el amocionario) tenga un cierre donde se invite a las familias y donde frente a distintas obras de arte ellos puedan expresar qué sentimientos les despiertan y que puedan hacer su propia obra de arte a partir de uno de esos sentimientos», explicó González.
El 4 de octubre la escuela cumple 114 años, tiene 600 alumnos y una referente, Zulma Ocampo, quien fue directora durante muchos años y continúa siendo una piedra fundamental del establecimiento. El Mundial es una excusa para hablar de matemática o de geografía, «uno ubica donde están pasando los acontecimientos», dijo la directora que aclaró: «las emociones serían lo transversal, de lo que se van desprendiendo todos los otros contenidos».
Trabajar el acontecimiento
Lo que pasa en el Mundial de Fútbol no es un hecho aislado para La Argentina que viene trabajando distintos acontecimiento. «El año pasado trabajamos lo artístico tomando como eje los artistas rosarinos. Eso en distintos grados y con distintas cronologías. También el año pasado trabajamos Leyendas Argentinas y visitamos la escuela Toba, hicimos un hermoso intercambio en el que nos mostraron sus tradiciones, sus costumbres, sus ceremonias. Después otro de los proyectos surgió cuando fuimos al supermercado, una salida que se hace habitualmente, y los chicos encontraron a una artista que estaba trabajando con venecitas. A los chicos los incentivo así que nos pusimos en contacto y la artista vino a trabajar con nosotros, junto a los chicos y los padres, y cubrimos con venecitas la base del mástil de la bandera», concluyó a modo de ejemplo la directora.