Daniel Minacore es un director técnico rosarino que desde hace casi dos décadas trabaja en la formación de juveniles en España, más precisamente en el club que fundó Daniel Carnevali, ex arquero de Central y de reconocida trayectoria en el Viejo Continente, que lleva su nombre y participa en los torneos de Las Palmas de Gran Canaria.
De visita por la ciudad, el entrenador se hizo un rato en su agenda para charlar con El Hincha sobre la formación de futbolistas, contó como se trabaja en el ascenso ibérico, la gran admiración que tienen por los jugadores y técnicos criollos y lo que representan para el fútbol europeo.
—¿Cómo se inició tu relación con Daniel Carnevali?
—Por intermedio de un amigo en común. Yo estaba trabajando en la filial de River, después pasé por las inferiores de Social Lux, Central y Newell’s y desde el año 2000 que estoy con él en España, puntualmente en la Escuela de Fútbol Daniel Carnevali, que participa en el ascenso español en Las Palmas.
—¿Cómo es trabajar con él?
—Aprendo muchísimo en el día a día, tiene una gran capacidad para formar jugadores y arrancamos con cuarenta futbolistas, pero yo creo que ya estamos por los trescientos. Las categorías van avanzando muchísimo, competimos en Las Palmas de Gran Canaria, un torneo muy competitivo, en una liga muy fuerte de allá.
—Teniendo en cuenta los avances de la tecnología y las nuevas técnicos, ¿es muy distinta la formación de jugadores en España con respecto a Argentina?
—De seis años a esta parte estamos tratando de mejorar siempre en lo que respecta a los trabajos de pegada, posicionamiento y la mentalidad del jugador. Sinceramente la palabra “formación” tiene muchas cosas, por ejemplo de tratar de hacerle saber cómo es la Primera División, en todo lo relacionado al juego y sus variables.
—Una diferencia que puedas mencionar.
—Allá en Europa se trabaja mucho más en la parte física que acá en Argentina, aunque también vale destacar que se hace más hincapié en la presión, en la técnica individual y en aprovechar los espacios reducidos.
—Cada vez vienen a buscar futbolistas más jóvenes, ¿qué explicación hay para esto?
—El jugador argentino es muy distinto, lleva mucha más pasión adentro, es muy respetado y eso te llena de orgullo. Las inferiores de Rosario y toda Argentina siempre se destacaron por sacar grandes futbolistas, por eso son tan miradas.
—¿Lo miran mucho al club desde los principales equipos de España?
—Sí, le hacen mucho seguimiento a nuestros chicos. Vienen desde Real Madrid o Barcelona, saben lo que pasa en la isla, también lo siguen mucho desde Betis o Valencia. Están muy bien informados y nos consultan sobre los juveniles que van apareciendo.
—¿Es complicado que un jugador formado en un club de la Isla llegue a la elite?
—Sinceramente es muy complicado, como se da acá. Te vienen de cualquier lado a buscarlo, pero nosotros tratamos de elegir lo mejor para los chicos, no solamente en lo futbolístico, sino que también en lo humano. Ellos hacen un trabajo de seguimiento, aunque respetan mucho la opinión que le damos los formadores.
—En lo personal imagino que más que contento con el trabajo que vienen realizando.
—Desde que llegué a Gran Canaria crecí mucho, tanto en lo personal como en lo laboral. En Rosario tuvo muy buenas enseñanzas de un gran formador como Daniel Teglia, pero allá Daniel Carnevali es alguien que tiene las ideas muy clara y aparte sabe muchísimo de fútbol, de la formación y me sirvió a mí para mejorar. Muchas veces le digo a él “no es tener un título, sino la experiencia”. Después de tanto recorrer, seguir aprendiendo que esto no se termina nunca, soy un agradecido de estar con él y no pienso moverme de ahí por ahora (risas).
—Los entrenadores argentinos son cada vez más buscados por los grandes de Europa, otro motivo de orgullo para los coterráneos como vos.
—Sí, tuve la suerte de aprender mucho de Marcelo Bielsa cuando estaba en Rosario y ahora es reconocido en España, lo mismo que sucede con el Cholo Simeone o en su momento con el Toto Berizzo, que trabajan muy bien. El argentino es muy valorado por lo motivador que es, te transmite otra cosa, está bien valorado.
—Trabajaste con técnicos y formadores nacionales y también con españoles y de otros países del Viejo Continente, ¿qué diferencia hay entre los criollos y el resto?
—Yo creo que todo pasa por la motivación y cómo lo habla de frente al jugador. Tiene mucho dialogo, algo que no me convence mucho de los entrenadores de allá. El argentino le llega a los futbolistas de una manera que lo hace rendir al cien por ciento en el campo de juego. La clave es mucha motivación, prácticas fuertes, es otra cosa distinta.