Este viernes una comisión del TC 2000 estará en nuestra ciudad para inspeccionar la marcha de las obras que se están realizando en el autódromo de cara a la carrera programada para el 2 de octubre y que marcaría el regreso de la categoría luego de quince años.
Los tiempos se acortan y la visita de mañana puede ser clave para confirmar o no la competencia. Según había expresado en su momento Diego Mesa, encargado de inspeccionar autódromos por parte de la CDA del ACA, el autódromo “tiene que estar listo 45 días antes para poder tener la autorización de la mesa directiva”.
Si esos plazos se cumplen y no hay prórroga posible, alrededor del 15 agosto (teniendo en cuenta la fecha de la competencia) todo debería estar listo.
A diez días de esa fecha, mañana se podrá tener una real dimensión del estado de obras y si finalmente tras una década y media el rugido de los motores vuelve a sonar en nuestra ciudad.