La primera jornada cambiaria luego del endurecimiento del cepo, anunciado por Guido Sandleris, cortó una racha de trece subas consecutivas del dólar. La medida generó un volumen de operaciones cambiarias significativamente menor al de las últimas semanas, lo que generó incluso una caída en la cotización de la divisa este lunes.
La jornada del domingo no solo dejó la victoria electoral de Alberto Fernández. Cerca de la medianoche se conoció que el Banco Central anunciaría nuevas medidas en relación al control cambiario. A primera hora de este lunes, el presidente del Banco Central daba a conocer que la compra de hasta 10 mil dólares mensuales se reduce, como máximo, hasta 200 para operaciones vía cuenta bancaria.
Esta medida generó un efecto inmediato en la cotización del dólar, que durante este lunes cayó más de un peso y para el promedio entre bancos cerró a 63,45 pesos. De acuerdo al análisis de economistas de la ciudad, la decisión del Central puede generar un alivio parcial, aunque no garantiza una estabilidad en la cotización de acá al 10 de diciembre.
Una merma “testimonial”
El especialista en finanzas, Federico Fiscella, consideró que este lunes el dólar cayó pero “de una manera testimonial” a raíz de un mercado “muy chico”. El Banco Central mantuvo las subastas pero con menor volumen de operaciones. “La demanda fue baja por el cupo establecido y porque se suma a las empresas que no pueden comprar”.
Por otra parte destacó que en paralelo a la evolución de la divisa oficial, habrá que atender cotizaciones alternativas como el dólar blue y el contado con liqui imponiendo nuevas restricciones. Además del comportamiento del dólar, mencionó otras prioridades a corto plazo y entre ellas destacó: “Las primeras negociaciones ahora tendrían que ser destrabar la cuota con el Fondo y ver si se va a hacer algún tipo de plan con la deuda a corto plazo con los bancos”
A pesar de estas cuestiones que dificultan el escenario a futuro, rescató que con la medida anunciada por Guido Sandleris “es probable que se pueda mantener al menos la cotización oficial”. De todas formas consideró que será “una cotización ficticia, porque se vende de manera muy acotada y eso reduce la posibilidad de que suba”.
Una de los principales problemas que surgen a partir de esta medida tajante, tiene que ver con lo que sucederá una vez que se desarme esta política cambiaria. En ese sentido, Fiscella consideró que “volver para atrás es muy difícil”.
En relación a los volúmenes operados durante la primera etapa consideró: “La buena noticia tuvo que ver con que no se disparó el precio, aunque fue en un mercado muy chiquito”. Esto tiene que ver con que en el debut del cepo más restrictivo, se operaron más de 200 millones de dólares cuando la suma operada venía siendo de 800 millones.
“Así y todo, 200 millones de dólares para un cepo tan importante es mucha plata”, deslizó el especialista en finanzas que además sostuvo que el comportamiento de la divisa tendrá que ser monitoreado día a día.
Por último, y en referencia a lo que pueda suceder en las próximas jornadas, estimó que la cotización no mantendrá el mismo comportamiento de este lunes. De hecho consideró que “habrá días más complicados teniendo en cuenta que al gobierno se la van a reducir las reservas por los pagos de deuda próximos”.
Efecto en la economía
Por su parte, el economista de Fundación Pueblos del Sur, Esteban Guida, consideró que la profundización del control de cambios era una medida necesaria, aunque debería ir acompañada por un cambio de criterio en la política económica.
“A pesar de que el mal llamado cepo tenga una connotación negativa, apunta a controlar el volumen de un recurso que tiene un propósito, que es principalmente el intercambio comercial”, explicó Guida. Por otra parte lo consideró un instrumento necesario y que se aplica en otras economías.
Al ser una medida que restringe solo la compra, el dirigente de Pueblos del Sur consideró que “no debería generar problemas en los agentes económicos ya que por ejemplo, aquellos empresarios que necesitan importar, efectúan las operaciones en pesos”.
En relación a un posible impacto sobre la economía doméstica aseguró: “Todo esto no tiene ningún sentido si no cambiamos el modelo económico, porque la respuesta para jubilados o trabajadores está en la reactivación productiva”
Por otra parte consideró que el tema está siendo abordado con una perspectiva especuladora. En este sentido entendió que la medida no afecta a todos por igual, ya que que existen personas que buscan resguardarse de la devaluación y que ya no tendrán acceso a la divisa, mientras que otros actores de un acaudalado poder adquisitivo podrán obtener divisas mediante otros mecanismos como el famoso contado con liqui.
Con respecto al momento en que se tomó la medida, consideró: “El problema era tener una economía desregulada, con un mercado cambiario totalmente libertino que era financiado por la deuda externa, entonces había una transferencia fenomenal, los dólares iban para los que lo podían comprar y lo terminaban pagando los argentinos a través de la deuda externa”