La gran cantidad de agua que incesantemente cayó sobre Rosario fue demasiado para el precario terreno de juego del Gabino Sosa. Incluso, un par de horas antes del inicio del partido de vuelta entre Central Córdoba y UAI Urquiza por los cuartos de final del reducido, por el barrio de Tablada ya se intuía que la cosa se postergaba para esta tarde. Y así pasó.
Luego de constatar el lodazal en que se había convertido el césped del Gabino, el árbitro Ariel Penel decidió con mucho criterio suspender el encuentro para hoy, luego de deliberar en el vestuario un buen rato con los dirigentes y capitanes de ambos bandos.
Aunque la postergación del partido se acordó rápido y sin problemas, distinto fue definir a qué hora iba a empezar a rodar la pelota. Las órdenes del colegiado eran no hacer coincidir el choque con el amistoso entre la selección argentina y Paraguay (empieza a las 16), de modo que la cosa no podía arrancar hasta después de las 18. Pero chocó con la negativa de Urquiza, que quería jugar lo más temprano posible.
Para colmo, en pleno cónclave entre el juez y los representantes de ambos equipos, se cortó la luz en el vestuario del Gabino Sosa y todo quedó a oscuras. Lo que faltaba.
Al final, entre las luces de varios celulares y con la ayuda de una solitaria linterna que apareció milagrosamente de la nada para ofrecer un poco de claridad, el árbitro decretó para las 18.30 de hoy el inicio del partido, donde el Charrúa estará obligado a jugarse la vida para dejar el triunfo en casa y así obtener el boleto para las semifinales del reducido.
Si quiere avanzar a la próxima instancia, Córdoba debe revertir el 1-2 que sufrió en el choque de ida disputado el pasado miércoles en el estadio de UAI Urquiza.
Para la revancha, el DT Marcelo Vivas dispuso dos variantes con respecto al equipo que arrancó jugando en Villa Lynch. En el mediocampo Germán Medina irá por Nicolás de Bruno, mientras que en la delantera Alejandro Fiorina hará lo propio con Alejandro García.
Al Charrúa sólo le sirve ganar. Con un triunfo avanzará a semifinales, donde ya lo espera Laferrere tras eliminar a Liniers. El desafío no será fácil, sobre todo ante un rival inteligente como UAI Urquiza. Pero Central Córdoba dispone de argumentos sólidos como para inclinar la balanza a su favor. Ahora sólo resta esperar.