Después de tantas idas y vueltas finalmente se jugó el partido entre San Lorenzo y Tigre en el Nuevo Gasómetro. Fue victoria del Ciclón por la mínima para cortar una racha de cinco partidos sin ganar y fundamentalmente para distanciarse del Matador en la pelea por el promedio (le sacó 9 puntos).
Se jugaban 60 segundos de partido y el Ciclón ya ganaba 1-0. Nicolás Bianchi Arce rescató un rebote en el palo izquierdo de Javier García y abrió el marcador.
Con el gol del defensor, el conjunto de Leonardo Madelón ganó en tranquilidad y le metió presión a Tigre, que debió a salir a buscar el partido.
El Matador se hizo cargo, pero no lo suficiente para llegar al empate. Con Diego Morales impreciso careció de profundidad y a la dupla ofensiva compuesta por Luna y Maggiolo la pelota le llegaba poco y nada.
En la segunda etapa San Lorenzo se plantó netamente de contra y esperó lo que hacía Tigre. El objetivo estaba claro: defender la ventaja inicial y apostar a liquidar la historia.
La visita no hizo demasiado y a medida que pasaban los minutos el triunfo del Ciclón estaba más cerca. Incluso tuvo chances de aumentar, pero no fue inteligente a la hora de la definición.
Maglio pitó el final y fue pura alegría en el local. Por el triunfo, por el rival y porque con estos tres puntos tomó un poco de aire en la lucha de los promedios.
