El Concejo municipal aprobó los proyectos del Ejecutivo llamados “paquete de seguridad”, y que consiste en la renovación edilicia de 4 manzanas en torno a la vieja cárcel de Zeballos y Suipacha, la creación de las estaciones policiales Norte y Noroeste en terrenos municipales, y unos cambios de traza de calles para la ampliación de las penitenciarías n° 5 y n° 12, en la zona oeste de Rosario.
La iniciativa de la gestión Javkin fue aprobada este jueves una votación dividida. El conjunto de concejales que conforman la alianza política Unidos apoyó en bloque y sin fisuras todo el proyecto. Mientras que votaron en contra todos los ediles referenciados en el peronismo y Ciudad Futura. En concreto, la votación terminó 17 a 10.
El punto de la polémica es el plan para construir un complejo de torres de departamentos y comercios en la manzana que dejará vacante la U.P. 3, la vieja cárcel conocida como La Redonda.
Hay un planteo del vecindario que se opone a la idea de la Municipalidad de habilitar allí la construcción de cuatro torres de 66 metros de altura, por parte de desarrolladores privados. También estas voces del barrio rechazan la construcción de la Estación Policial Centro, en la esquina de Pellegrini y Suipacha, donde hoy está la sede del Sies. Y exigen que se los consulte para tal renovación edilicia en esas cuatro manzanas, entre Zeballos, Suipacha, Pellegrini y Ovidio Lagos.
La concejala María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular, por su parte, recordó en su exposición que ella había planteado que “faltaban los convenios de cesión”, respecto de los terrenos de avenida Pellegrini y Suipacha y para la Estación Policial Noroeste, y mencionó que se plantea “cesión por 20 años y prórroga por 20 años más”. Consignó que “nadie los va a demoler”, por lo que estimó que “deberían enajenarse, transferirse a la provincia los terrenos” y “acordar una compensación”. En el mismo sentido marcó que “si por una futura autonomía hay policía municipal, se transferirán a la ciudad”.
Consideró el edil Agapito Blanco, de Juntos por el Cambio, que “no es tradición del municipio ceder tierras” y aludió al caso de las instituciones deportivas del parque de la Independencia.
En tanto el concejal Carlos Cardozo, del PRO, consignó que “la compensación es la construcción de los edificios, que superan en mucho a los ya construidos”, respecto a las estaciones policiales existentes. Fabrizzio Fiatti, del oficialismo, manifestó que “el aporte es inespecífico” y lo destacó en el marco del Acuerdo Rosario, “obras no sólo anunciadas, sino en construcción”.
En tanto, la edila Nadia Amalevi, de Arriba Rosario, recordó que el concejal Juan Monteverde, de Ciudad Futura, había “ponderado que se tratara en conjunto, no sólo lo de la cárcel”.
En tal sentido la concejala Jesica Pellegrini, de Ciudad Futura, dijo que “fuimos muy claros, estamos de acuerdo en la Estación Policial Centro, “pero el plan integral amerita otro tipo de tratamiento”.
En una nueva intervención la concejala María Fernanda Gigliani, dijo respecto a la “descatalogación de la Unidad de Detención Nº 3 que no hay un informe del Programa de Preservación del Patrimonio, el Estado tiene que ser ejemplificador, tiene que haber informe”.
Recordó que “organismos de derechos humanos habían pedido preservar algún sector como espacio de memoria”. También hizo referencia a un mail de los vecinos de la zona.
Más adelante la presidenta de la comisión de Gobierno, Julia Eva Irigoitia, del bloque Justicialista, preguntó respecto al destino de las áreas municipales que se trasladarán.
Indicó el edil Fiatti, del oficialismo, que se alquilará un espacio para el Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies) y que luego se construirán nuevas instalaciones al lado del Centro Integrado de Operaciones Rosario (Cior), sobre avenida Francia.
Por su parte, el concejal Cardozo destacó la importancia de la “construcción de las tres megacomisaría, la ampliación de las cárceles, y la construcción de la cárcel para presos de alto perfil en Piñero”.
Igualmente mencionó la necesidad de sacar a “los 280 ó 300 presos de la mazmorra de la Unidad de Detención Nº 3, del siglo XIX. Sacar ese infierno”.
Mientras que el edil Fiatti sostuvo que “no hubo propuestas alternativas sobre la altura” para dicha manzana. También aludió a los “años de estudio” por parte de equipos técnicos.