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El Concejo impulsa curso para conductores para terminar con las agresiones machistas

La comisión de derechos humanos del Concejo dio despacho al proyecto de Norma López que tiene una mirada amplia de los derechos desde una perspectiva de género y también de acceso a los mismos.

«Andá a lavar los platos» es un insulto que muchas mujeres tuvieron que soportar más de una vez cuando están frente al volante. En una sociedad signada por la violencia machista, el ámbito vial no escapa a esta realidad. La concejala Norma López habló sobre el proyecto que presentó para la creación de un curso de formación con perspectiva género para conductores que solicitan el carnet de conducir por primera vez o deben rendir nuevamente para obtenerlo. 

La comisión de derechos humanos del Concejo dio despacho al proyecto de López que tiene una mirada amplia de los derechos desde una perspectiva de género y también de acceso a los mismos. La edila se manifestó sobre los numerosos conflictos viales que existen en la ciudad  y cómo muchas de las agresiones que se dan por cuestiones de tránsito remiten a insultos machistas.

En este marco, señaló que de concretarse este curso de formación se llegaría a una población amplísima y se podrá «ir consolidando una mirada de igualdad entre varones y mujeres en los tratos cotidianos». «Es uno de los pocos espacios, cuando se gestiona una licencia de conducir, donde el Estado tiene la oportunidad de hablar con una enorme cantidad de mujeres y varones».

La concejala aclaró que la incorporación de contenidos vinculados al acceso de derechos de niñas, niños, adolescentes y mujeres no tiene un fin punitivo: «El objetivo el Estado no es no implementar el carnet, sino incorporar conocimientos de derechos». Se trata, planteó, de generar nuevos códigos de convivencia, que haya más posibilidades de un trato digno entre las personas de Rosario.

«Tiene que ver también con el trato que tenemos y que recibimos permanentemente las mujeres que somos una de las grandes cuestionadas en la seguridad vial», planteó. «Es una iniciativa que propone que cuando uno accede a la capacitación para la licencia de conducir se presenta una buena oportunidad de acceder a conocimientos sobre perspectiva de género y acceso a los derechos», manifestó.

Según explicó el requisito no solo es para la primera vez en que se aspira a tener la licencia de conducir sino para las renovaciones con faltas graves o en las que el Tribunal Municipal de Faltas defina que tenga que hacerse de nuevo. No se aplica en las renovaciones del carnet.

El curso habla de formación para la obtención de la licencia de conducir, capacitando a los conductores y las conductoras de manera obligatoria y permanente. En sus considerandos, la iniciativa habla de «acoso callejero» y advierte que las campañas de prevención y capacitación en materia de género «pero nada se ha trabajado desde la óptica de los varones agresores» para concluir que «las medidas estatales adoptadas evidentemente han sido insuficientes, dado que el flagelo de la violencia avanza».

El proyecto también habla de impulsar políticas públicas que tengan un impacto real y sostenido en el tiempo, con herramientas pertinentes para paliar las condiciones de desigualdad a las que las mujeres se encuentran sometidas, e incluso romper este mandato de tener que ser ellas mismas las artífices de la prevención y de la solución.

«La pandemia no aumenta los femicidios sino que hace de las mujeres, niños y adolescentes una mayor concentración de lo que es la propiedad privada de los cuerpos en los violentos. Tenemos más delitos sexuales, más golpes, más violencia y mas sumisión de mujeres y niños a violentos con los que conviven», concluyó.

 

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