Por: Carina Ortiz
El conflicto desatado hace aproximadamente un mes entre un grupo de transportistas –agremiados en Fetra– que se apostaron en el ingreso de la aceitera Santa Clara, y la empresa Molinos Río de la Plata, dueña de la planta, sigue sin solución. En la faz judicial, la jueza penal que investiga la denuncia de amenazas coactivas presentada por la firma citó para mañana a siete transportistas para tomarles declaración informativa sobre el hecho. Y en la misma jornada, los camioneros se reunirán para evaluar medidas gremiales “de mayor alcance” contra la aceitera: es que ya resolvieron rechazar la propuesta empresaria de una contratación por dos años por excluir explícitamente a quienes protagonizaron las protestas.
El conflicto comenzó cuando un grupo de transportistas que desde hace tiempo realiza viajes para la empresa Molinos Río de la Plata denunció una tercerización de los transportes y plantó una protesta en la puerta de la aceitera Santa Clara, ubicada en Uriburu al 3400. Los manifestantes explicaron a El Ciudadano que son un grupo de 41 fleteros locales que trabajan en forma exclusiva para la aceitera desde hace más de 25 años. “La empresa comenzó a darnos menos trabajo y a contratar a camiones de pueblos vecinos para el trasporte, carga y descarga de mercaderías ofreciendo un 50 por ciento menos por viaje, con lo cual no podemos competir”, se quejaron los transportistas, que en todo momento aclararon que su protesta era “pacífica” y que no interrumpían el ingreso a la fábrica.
Molinos no le entendió así. Realizó una denuncia penal contra los transportistas, acusándolos de bloquear el acceso a la planta y no permitir el ingreso de otros camiones. Incluso fuentes de la aceitera dijeron que había “autos particulares” de los manifestantes impidiendo la llegada de otros camiones. “Los paran unas cuadras antes y no los dejan llegar, le tiran «miguelitos» en las ruedas”, acusaron.
Además, desde la empresa se aseguró que la protesta de los transportistas no se inició como un reclamo por tener menos viajes, sino como una demanda por tener más: “Son dueños de camiones que trabajan sin un contrato escrito con la empresa desde hace muchos años y que están nucleados en una asociación civil. Lo que reclaman es el aumento en la cantidad de viajes que realizan y solicitan exclusividad”, aseguró una fuente de Santa Clara.
Como muestra del largo camino que falta recorrer para llegar a un acuerdo, los transportistas salieron a desmentir la versión. Según explicaron, la protesta la protagonizaron dueños de pequeños y medianos camiones que pertenecen a Transportadores Rurales Argentinos (TRA) filial Rosario, y a su vez se agrupan en Fetra. Por ello también la Federación acudió a la Justicia: presentó un escrito donde explica el conflicto. Allí resume la relación que los camioneros mantuvieron durante años con la firma como una “clara relación de dependencia social y económica que hacen que el vínculo establecido amerite un marco regulatorio y un tratamiento especial” y solicitaron una “mesa de concertación” a los fines de lograr un diálogo y encontrar una solución al conflicto.
La solicitud ya fue informada al Ministerio de Trabajo a través de un oficio girado por el juzgado interviniente.
Con todo, el Juzgado de Instrucción Nº6 dispuso la citación de siete de los transportistas que se manifiestan al frente de la aceitera para que presten declaración informativa en relación a la denuncia de la empresa. Esta se hizo por “amenazas coactivas”, pero trascendió que también Santa Clara inició una demanda civil por daños y perjuicios contra los transportistas.