Fuente: https://www.diariosintesis.com.ar/
El 1º de marzo se cumplió un año desde que Francesco Giovani Fiorucci (“Chesco”) recibió más de 10 disparos y murió en un feroz ataque perpetrado en el marco de un aparente enfrentamiento entre bandas narco rivales.
El hecho ocurrió en barrio Mitre y, desde entonces, la madre de “Chesco”, Estela Rueda Césped, inició una lucha para que el crimen se esclarezca. Sin embargo, a pesar del tiempo transcurrido, la investigación parece no avanzar y hasta el momento no hay personas imputadas.
“Ya pasó un año desde que a mi hijo lo fusilaron de 14 disparos, dos de ellos en la cabeza, en la puerta de un bunker y no hay ningún imputado. Esto se lo adjudico al fiscal de la causa, Maximiliano Nicosia Herrero. Le llevo testigos y los desestima, todo se vuelve muy lento, creo que no está haciendo las cosas bien”, sentenció Estela en diálogo con Diario Síntesis.
Madre e hijo. Estela y Chesco.
Pero ella no se quedó solo en las críticas. “Hice varias denuncias con respecto a esta manera de proceder del fiscal, las presenté directamente ante la Dra. Natalia Benvenutto, jefa de la Unidad Fiscal de San Lorenzo y ante el fiscal regional Jorge Nessier. Veremos qué es lo que pasa a futuro”, señaló.
Luego dio otro ejemplo: “A mi hijo lo mataron sobre su moto que fue muchas veces peritada. Se la pedí durante meses a Nicosia y no logré nada, denuncié ese hecho puntual ante la jefe Benvenutto y al día siguiente me la reintegraron”, detalló y añadió: “Más allá de eso, la cuestión es que desde hace un año el fiscal de la causa viene dilatando las cosas y no entiendo por qué. Creo que ya es hora de que a este tema lo maneje alguien superior a él”.
Sobre el motivo de la balacera que le costó la vida a “Chesco”, Estela esgrime como teoría que “fue un ataque que no era dirigido a él, sino a otra persona. Mi hijo, lamentablemente, fumaba marihuana en las noches después de trabajar todo el día con el padre. Fue a un búnker a comprar cigarrillos y lo confundieron con el hijo la dueña de esa casa, de contextura similar y que también manejaba una moto de color rojo. Todas las circunstancias y todos los testigos coinciden en eso”, expresó y agregó: “mi hijo fue víctima de una guerra narco con la que no tenía nada que ver”.
Víctima. Francesco Fiorucci fue alcanzado por las balas de una banda narcocriminal.
Las críticas de la madre de la víctima también apuntan a la Justicia Federal. “El fiscal de San Lorenzo solo entiende en la parte penal, pero en lo relacionado al narcotráfico es de otra órbita, por eso llama la atención que a apocas cuadras de donde pasó lo de mi hijo, en el CIC, funciona una sede de Fiscalía Federal, mientras todos saben que en ese sector de la ciudad hay seis búnkers diferentes y sigue habiendo enfrentamientos como el de hace unas semanas en el que balearon a tres chicas en la puerta de una casa. Nadie hace nada, nadie se involucra”, aseguró.
En el mismo sentido sumó que “el nuevo gobierno provincial llegó con la promesa de cambiar estar cosas. Sé que secuestran teléfonos celulares en las cárceles, pero las órdenes de los jefes de las bandas se siguen haciendo desde los penales. De verdad, al narcomenudeo no lo están combatiendo y se sigue expandiendo en los barrios como Capitán Bermúdez, Norte, Mitre, Villa Felisa. Hay bunkers y se tirotean entre ellos. Me indigna cuando desde arriba dicen que va a haber un cambio y realmente no lo hacen”, agregó.
Sin duelo
Estela Rueda Césped afirma que a pesar de los doce meses transcurridos desde el crimen que la dejó sin su hijo, aún no pudo hacer el correspondiente duelo.
“Chesco falleció, ya no está, dejó de existir. El sufrimiento que llevo es indescriptible porque me sacaron todo lo que tenía. Era mi único hijo, yo estaba en búsqueda de mi identidad porque no sé quiénes fueron mis padres, pero dejé de buscar porque lo hacía para dejarle esa herencia a él, ahora no tiene sentido. No tuve duelo, lo que tengo es odio y mucha bronca hacia todos los poderes del Estado que no hacen nada para terminar con esta plaga que está infectando a todo el Cordón Industrial”, lamentó y concluyó: «Siento que, al no poder encontrar justicia, a mi hijo lo asesinan nuevamente«.