De gran momento, Barcelona y Espanyol jugarán uno de los más apasionantes derbis a nivel mundial, pues ambos atraviesan una brillante actualidad futbolística: acumulan cifras récord e imponen una interesante idea de juego.
Espanyol, que será local, ha vencido en sus 7 partidos en casa, sin ceder siquiera un punto; mientras que el Barça ha ganado sus 7 cotejos en condición de visitante. Al menos uno cederá en esta ocasión y la racha se quebrará.
Lionel Messi será el único argentino en cancha que vestirá los colores blaugranas, mientras que Javier Mascherano esperará en el banco de relevos. En tanto, Daniel Osvaldo y Juan Forlín formarán parte del once inicial del equipo que conduce técnicamente Mauricio Pochettino, y entre los suplentes estarán el arquero ex-Central Cristian Álvarez, el ex-Newell’s Aldo Duscher y Jesús Dátolo.
Barcelona ostenta la mejor temporada goleadora desde la llegada de Guardiola con 72 goles en 25 partidos oficiales y su arquero Víctor Valdés está a 56 minutos de superar su mejor tiempo sin recibir goles (517’).
Espanyol sólo recibió dos goles en su casa y parece tener un cerrojo que esta tarde su histórico rival de ciudad intentará romper a fuerza de toque y el desequilibrio individual que caracteriza al actual mejor equipo del planeta.
Los condimentos están planteados. Sin grandes ausencias, tanto Guardiola como Pochettino alinearán a su once de gala, y el Cornellà-El Prat será testigo, al menos en la previa, del más apasionante e igualado derbi de los últimos tiempos.
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