«El presidente tiene que recapacitar. No se construye un país a los gritos y no contribuye que se haga desde la primer entidad institucional del país», remarcó el rector de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci, quien habló en la mañana de este miércoles sobre la contundente movilización en defensa de las universidades y de toda la educación pública que se desplegó masivamente en todo el país, incluyendo ciudades y provincias en las que Javier Milei arrasó en el balotaje de noviembre del año pasado.
Entrevistado por el programa La Mañana de CNN sobre la marcha universitaria, los dichos, Bartolacci se refirió al posteo de Milei en redes sociales en el que publicó el dibujo de un león bebiendo de una taza que decía: “Lágrimas de zurdos”, en respuesta a la descomunal protesta.
«Tengo el corazón sano: en muchos años de vida universitaria nunca vi algo así», expresó el académico. «Esto fue posible sólo porque la sociedad argentina dijo: «Con esto no»». La educación pública es un valor y la llave para resolver los problemas de la Argentina», reflexionó.
Y aclaró: «El mensaje de la sociedad argentina de ayer fue para todo el mundo, ojo».
«La marcha –continuó Bartolacci– también fue un mensaje para la oposición: que no lean cosas que la marcha no quiso decir. Que este respaldo no nos confunda ni nos saque energía a las universidades».
Además postuló: «En un país donde no nos ponemos de acuerdo en nada es maravilloso que la educación sea un punto de encuentro».
«Marchó mucha gente que no piensa igual pero sí cree que hay que cuidar la educación pública», advirtió.
Sobre la situación presupuestaria de las universidades nacionales, a las que la red de trolls y comentaristas del oficialismo en redes sociales mencionó con desprecio, acusando de supuestos “curros” y advirtiendo que deben ser auditadas –lo que hace en forma permanente la Auditoría General de la Nación desde hace décadas, consideró: “Estamos haciendo magia”. E insistió: “Estamos en el punto donde el esfuerzo para seguir se tiene que convertir en magia».
Y advirtió: «Cuando no hay más recursos, ya no se puede seguir sólo con esfuerzo. Si esto no se corrige, no vamos a poder seguir funcionando».