Con el presupuesto recién estrenado y tras el imprevisto que significó el bono extra de 1.000 pesos que la Municipalidad de Rosario se comprometió a pagar a sus empleados que habían amenazado con ir al paro en apoyo de esta demanda, la secretaria de Economía y Hacienda de la ciudad, Verónica Irízar, no descarta insistir con el revalúo inmobiliario para mejorar la recaudación vía Tasa General de Inmuebles o lograrla mediante alguna alternativa que surja del Concejo Municipal.
Al mismo tiempo, con referencia a la próxima negociación paritaria para actualizar los salarios de los trabajadores del municipio, la funcionaria indicó que aún es prematuro hablar de números y dibujó el escenario de la discusión, como se lo ve desde el Palacio de los Leones: “Ambas partes –planteó refiriéndose a la representación sindical y las propias administraciones– deberán pensar responsablemente un punto de equilibrio”.
Sus palabras parecieron apuntar directamente a declaraciones del secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario, Antonio Ratner, quien días atrás manifestó en este diario que desde el gremio plantearán un piso del 30 por ciento como incremento sobre los sueldos acordados en 2013.
Salarios y recursos
“Es prematuro adelantar la discusión paritaria porque no hubo aún pautas tanto a nivel nacional como provincial. Igualmente, venimos planteando que los incrementos de los salarios municipales en los últimos años han sido superiores a la inflación medida por el Ipec (Instituto Provincial de Estadísticas y Censos). El año pasado cerramos en un 26 por ciento, cuando la provincia lo hizo en un 23,5. Por eso creo que ambas partes tenemos que pensar responsablemente y buscar un punto de equilibrio que no implique dificultades financieras para el municipio”, declaró Irízar.
Asimismo, la funcionaria explicó que las paritarias marcarán también cómo se trabajará con el presupuesto 2014 y no descartó volver a poner en debate el aumento de la TGI a partir del revalúo inmobiliario: “La verdad que la situación es complicada. Habíamos presentado el proyecto con un incremento de la Tasa General de Inmuebles a partir del revalúo inmobiliario. Esto no fue aprobado y el presupuesto es más bajo de lo que pensábamos. Si tenemos en cuenta que en el 2001 la TGI financiaba tres veces el ABL (alumbrado, barrido y limpieza) y ahora sólo el 77 por ciento, advertimos lo complejo de la situación. Vamos a esperar a que pasen las paritarias, tanto las propias como de transporte y recolección de residuos, analizaremos la situación y abriremos todas las instancias de diálogo necesarias con el Concejo. No está resuelto volver a presentar el proyecto de aumento de la TGI, pero tampoco está descartado”.
En este sentido, Irízar reiteró que desde el municipio consideran al revalúo inmobiliario como el “instrumento fiscal más justo, equitativo y progresista de recaudación”, aunque no descartó otras alternativas que proponga el Concejo Municipal.
El pago del bono
Respecto de la forma en que se hará frente al pago de la primera cuota del bono –500 pesos acordados para el lunes–, Irízar explicó a El Ciudadano que esos fondos se encuentran garantizados, mientras se está “rearmando el plan de trabajo financiero y se evalúa si va a ser necesario pedir un adelanto de la coparticipación a la provincia” para abonar la segunda cuota, en el curso de la primera quincena de febrero.
“Estamos viendo si pedimos el adelanto de la coparticipación al gobierno provincial, que expresó voluntad al respecto”, manifestó la funcionaria municipal. El monto total del bono representa al municipio 11 millones de pesos.
Radical rechazo desde el Palacio Vasallo
Sebastián Chale, concejal por la Unión Cívica Radical, consideró que hoy no hay condiciones sociales y económicas para un revalúo inmobiliario. “La propuesta del Ejecutivo escondía un aumento automático de la TGI por tres años mucho mayor a lo que el contribuyente puede pagar”, sostuvo.
El edil consideró apresurado pensar en aumentos en la TGI “cuando hace menos de un mes fue aprobado en el Concejo un incremento que aún no llegó a los contribuyentes”. En este sentido declaró: “Hablar del presupuesto limitado en el mes de enero es una hipótesis cuando, producto de la inflación y la coparticipación de fondos sojeros, los aportes que recibe el municipio pueden crecer. Hay que sacarle dramatismo a la cuestión. En diciembre se decía que era un problema no tener presupuesto, y el Concejo lo aprobó. Hay una necesidad de que el Ejecutivo tome con calma y precaución los problemas que van a apareciendo, si no parece que siempre es culpa del Concejo. No es posible que ante cada gasto el municipio plantee aumentar la tasa”.
Chale sostuvo que en Rosario el problema no pasa por una relación quebrada entre el Concejo y la Intendencia “sino entre contribuyente y municipio, que siente que lo que paga no se ve reflejado en los servicios”.
A su vez, manifestó su desacuerdo con el revalúo inmobiliario: “Sólo ajustar a partir del valor de una propiedad no está bien porque el mercado inmobiliario está inflado y es el más inflacionario que tiene la Argentina. Los ingresos de la gente van por otro lado y no se condicen con el valor del inmueble en el mercado. Cuando se dice que el revalúo es progresista se trata de una mentira”, sentenció.
