El Ejecutivo municipal presentó ayer de forma oficial su proyecto para el revalúo de terrenos, lo que repercutirá en un aumento de la Tasa General de Inmuebles (TGI) para financiar el presupuesto de gastos y recursos de 2016. La secretaria de Hacienda, Verónica Irízar, explicó la iniciativa que ingresó la semana pasada en el Concejo Municipal a los legisladores reunidos en la comisión de Presupuesto. La suba propuesta para el año entrante está prevista que sea distinta según en cuál de los seis radios en los que está divida la ciudad se ubica el terreno. En promedio, significa un aumento del 48 por ciento.
“Hasta hoy el 59 por ciento sobre el total de la ciudad paga menos de 100 pesos por mes”, adelantó Irízar, quien enseguida señaló que el monto está muy por debajo de lo que se abona en otras ciudades.
Esta presentación se dio cuando aún el gobierno provincial no oficializó su presupuesto para el próximo año (lo hará hoy). Los ediles no fijaron postura definitoria al respecto, prometieron analizar la propuesta.
Arriba la tasa
“El problema de financiamiento lleva a pensar en la necesidad de nuevas valuaciones de los terrenos, que junto con las valuaciones edificadas nos determina la valuación catastral que multiplicado por la alícuota fija el valor de la TGI. Hasta hoy el 59 por ciento del total de la ciudad paga menos de 100 pesos en promedio por mes”, expresó Irízar, quien luego explayó que este número es mucho menor al que se aplica en Córdoba y Tigre, por ejemplo. En promedio de todas las cuentas, entre terrenos muy valiosos y los no tanto, se pagan 200 pesos por mes en concepto de TGI. “Es una de las tasas más bajas del país”, insistió Irízar frente a la mirada inquisidora de concejales opositores.
Lo cierto es que se plantea un revalúo no por la calidad de lo edificado sino por la ubicación del terreno en la ciudad. “Lo más justo y equitativo es que paguen más lo que pueden aportar más. Sabemos que el valor del suelo se ha reconfigurado por las obras públicas y privadas”, apuntó. Sobre esto, el concejal electo Juan Monteverde, de Ciudad Futura, apuntó que se debe revisar el caso de la zona noroeste, donde conviven barrios privados y viviendas habitadas por personas de bajo poder adquisitivo.
Irízar respondió distintas aclaraciones y preguntas de los ediles. El concejal Sebastián Chale reflexionó que además de la capacidad contributiva hay que ver la calidad de los servicios que se prestan. “La valuación del suelo en cierta manera es la síntesis de todos los factores”, le respondió Irízar e insistió con que el municipio nunca recaudó más de tasa que lo necesario para cubrir costos de alumbrado, barrido y limpieza (ABL).
Para el año que viene
El proyecto de presupuesto 2016 preve gastos por 9.957 millones de pesos. Casi la mitad de ese total provendrá de las arcas locales (unos 4.879 millones de pesos) y el resto de la coparticipación nacional y provincial. Siempre según explicaron desde el Ejecutivo local, la capacidad del municipio para financiarse con recursos propios cayó en la última década casi un 10 por ciento.
Los fondos, según explicaron desde Hacienda, se destinan en su mayoría a fines sociales: casi el 60 por ciento, unos 5.392 millones de pesos, incluido lo relativo a la manutención del sistema de salud local que se lleva el acostumbrado primer puesto en las gestiones socialistas, el 24,8 por ciento del presupuesto del total. Le siguen los fondos destinados a servicios públicos. En un tercero y lejano lugar, con 18 por ciento del total presupuestado, en obras públicas. Respecto del año anterior este ítem sube su participación más de un 12 por ciento, alcanzando más de 1.000 millones de pesos. Las áreas dependientes de la Secretaría de Control y Prevención Ciudadana se llevarán el 6 por ciento del total presupuestado.
La secretaria Irízar también destacó durante su presentación las partidas presupuestarias destinadas a políticas de género y al Presupuesto Participativo (PP). Dentro de este último, el 15 por ciento se lo llevará el distrito Oeste.
No sólo el impuesto
El edil Osvaldo Miatello destacó que en el presupuesto presentado, una parte de los ingresos corresponde a la venta de bienes y servicios. Se trata de mil millones de pesos ligados a lo producido por el sistema de salud (facturación a obras sociales) y fármacos del LEM. “Es una suma de dinero interesante que no existía hace diez años”, consideró.
Todos juntos
La actual secretaria de Hacienda, Verónica Irízar, concejala a partir del próximo 10 de diciembre, expuso en el Salón de los Acuerdos del Palacio Vasallo. Estuvo acompañada por el próximo secretario de Hacienda, Santiago Asegurado, y Guido Boggiano, actual subsecretario de la misma repartición. A la mesa principal se sentaron el presidente del cuerpo legislativo, Miguel Zamarini; la presidenta de la comisión de Presupuesto Daniela León y los concejales Viviana Foresi, Manuel Sciutto, Jorge Boasso, Alejandro Rosselló, Sebastián Chale, Lorena Giménez Belegni, Diego Giuliano, Fernanda Gigliani, Norma López, Aldo Poy. También arrimaron sillas los concejales electos Juan Monteverde, Pedro Salinas y Caren Tepp, por Ciudad Futura.
Detalles no menores
Según la propuesta del Ejecutivo, se invertirán 1.408 millones de pesos para la recuperación del espacio público, y otros 300 millones para obra de cloacas, entre otros rubros.
“Impuestos disfrazados”
Los concejales opositores Jorge Boasso y Diego Giuliano se mostraron reticentes a la propuesta del Ejecutivo, a la que calificaron de “relato ficcional” de la realidad presupuestaria de la ciudad. “Es parte de un relato oficial con números. También se construyen otros relatos con los mismos argumentos. Las tasas son impuestos disfrazados. Tuvieron la suerte de nunca recaudar menos que el año anterior. Siempre han tenido buenos recursos”, consignó el radical.
“Es incoherente que la Municipalidad vincule el valor de la tasa municipal al costo de los servicios que presta y proponga un aumento del 50 por ciento cuando la inflación promedio es del 24 por ciento. Lo que ellos mismos calculan en el presupuesto es una inflación de 14,5 por ciento para todo el año 2016”, expresó Boasso. Además, puso reparos respecto de la calidad de los servicios prestados por el municipio en las distintas zonas de la ciudad.
“Una ciudad que aumenta el gasto en publicidad un 54 por ciento y mantiene un Fondo de Lucha Contra la Drogadicción en el mismo valor que en 2015 o destina nada más que 20 mil pesos por mes para los Bomberos Voluntarios, no tiene en cuenta las prioridades ni las necesidades reales de la ciudad”, sostuvo Giuliano.
