Violentos enfrentamientos armados están en curso en el sur de la capital siria, Damasco, entre fuerzas del presidente Bashar al-Asad y opositores, y los Comités de Coordinación locales de los disidentes hablan de 20 muertos, entre ellos 14 rebeldes armados y seis civiles.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, el Ejército realizó un «bombardeo de una intensidad nunca antes vista» en Tadamun y también hubo choques en el barrio de Jobar. Entre las víctimas hay dos niños.
Según testigos citados por la oposición, al amanecer las fuerzas gubernamentales, protegidas por vehículos blindados y tanques, intentaron penetrar en el barrio de Tadamun, sur de la ciudad y uno de los bastiones de los opositores.
Disparos de mortero cayeron sobre un edificio de las fuerzas de seguridad palestinas pro-gubernamentales en el campo de refugiados de Yarmuk, adyacente a Tadamun.
También se combatía en la zona meridional de una avenida que atraviesa la periferia de Damasco.
En tanto, en la ciudad de Aleppo, norte del país, la batalla llegó a las afueras de la ciudadela histórica, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, refirió la televisora panárabe Al Jazeera, a través de su enviado Ahmad Zaydan, que sigue a los rebeldes.
Violentos combates tienen lugar en dos barrios del oeste de esa urbe, Salaheddine y Seif al-Dawla, que están en manos rebeldes, quienes afirman que controlan la mitad de la ciudad.
Unidades rebeldes circundaron el Palacio de Justicia, en tanto que el Ejército Sirio Libre rebelde informó con videos aficionados que algunas de sus brigadas llegaron a Aleppo provenientes de Hama, centro-oeste sirio, para apoyar los ncombates contra el gobierno.
Siempre en Aleppo, los opositores atacaron anoche el edificio de la televisión de estado, e instalaron cargas explosivas en torno a esa sede, antes de ser atacados por la aviación siria, lo que los obligó a retirarse, indicó el Observatorio de Derechos Humanos.
En otro orden, la organización no gubernamental indicó que un conocido presentador de la televisión de Estado siria fue muerto cerca de Damasco por un grupo fundamentalista sunnita.
La reivindicación del asesinato de Muhammad al-Said fue publicada en un sitio jihadista y firmada por el grupo ‘Jubhat al Nusra’ (Frente de Salvación).
Al-Said había sido secuestrado por hombres armados el 19 de julio, y una fotografía suya fue publicada en el comunicado.
«Hicimos prisioneros, interrogamos y luego matamos al Sabih (miliciano oficialista)», se lee en el documento.
El Ejército Sirio Libre negó en su perfil de la red social Facebook cualquier participación en la muerte de Al-Said.
