Su fortuna personal está estimada en unos 2.500 millones, euros más, euros menos. Y después del Mundial disputado en su país, el emir Tamim bin Hamad Al Thani apenas si se quedó unos días en Doha para volar a Río de Janeiro.
Allí rentó dos yates gemelos -el Aquarius y el Alfa, valuados en unos 200 millones de dólares cada uno- para llegar navegando hasta el Río de la Plata.
El emir de Qatar, de 42 años y tres esposas, recibió el 2023 en Punta del Este pero al día siguiente puso proa hacia el oeste y en la tarde de este lunes, a bordo del Aquarius (92 metros de eslora, 14 de manga y cinco cubiertas) fondeó en las aguas marrones del río de La Plata, frente a la entrada del puerto de La Plata.
El emir, que hace dos semanas le entregaba la Copa del Mundo a nuestro capital Lionel Messi, parece que se tentó con conocer más de la Argentina, tierra de campeones.
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