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El ex obispo de Orán negó las acusaciones de abuso pero las víctimas ratificaron sus denuncias

Declaró este lunes en el inicio del juicio oral al que es sometido pero sus supuestas víctimas ratificaron las denuncias que involucran al religioso, informaron fuentes judiciales.

El ex obispo de Orán Gustavo Zanchetta, acusado de haber abusado de dos seminaristas, declaró hoy en el inicio del juicio oral al que es sometido y negó las acusaciones en su contra, pero sus supuestas víctimas ratificaron las denuncias que involucran al religioso, informaron fuentes judiciales.

Al declarar, el imputado negó las acusaciones, dijo haber tenido una «buena y sana» relación con todos los seminaristas, explicó su rol como obispo de la Diócesis de Orán y señaló que detrás de la denuncia de los dos seminaristas “hay otra connotación”.

Zanchetta habló en la primera audiencia del juicio oral que se desarrolla en la Sala II del Tribunal de Juicio de Orán, integrada por los jueces María Laura Toledo Zamora, Raúl Fernando López y Héctor Fabián Fayos.

El exobispo, que está imputado por el delito de abuso sexual simple continuado agravado por ser cometido por un ministro de culto religioso reconocido, en perjuicio de dos víctimas, hizo alusión también al expediente de la investigación canónica, y aseguró que tres sacerdotes le habían dicho que la denuncia se trataba de una venganza.

Asimismo, el religioso -que llegó a la audiencia acompañado por los abogados canónicos Javier Belda Iniesta y Francesco de Angelis- reveló que solía mantener charlas con los seminaristas porque como obispo debía conocerlos, sobre todo para saber si iban a cumplir su papel como sacerdotes, aunque agregó que nunca hubo alguna connotación sexual.

En este sentido, contó que siendo obispo visitó algunos domicilios a los que fue invitado por los familiares de los seminaristas, y ellos le confiaban sus problemas familiares o historias de vida.

Fue así que se enteró que una de las víctimas había sido abusado cuando era niño, por un tío, y detalló que a este tema lo trató con el seminarista.

En el juicio, que en septiembre del año pasado sufrió una postergación, interviene la Unidad Fiscal creada específicamente para este caso, conformada por Pablo Rivero y Soledad Filtrin Cuezzo; y el defensor oficial Enzo Giannotti.

Al inicio de esta primera jornada, se dio lectura al requerimiento de elevación a juicio de la causa, tras lo que el imputado prestó declaración.

Luego, el Tribunal ordenó el desalojo de la Sala, por pedido de la fiscalía, y se escuchó la declaración de los denunciantes sin la presencia de Zanchetta, quien posteriormente fue informado de ambas declaraciones.

Los dos exseminaristas ratificaron ante el tribunal sus dichos formulados en la etapa de investigación, y uno de ellos indicó que el sacerdote le habría formulado “propuestas amorosas” y requerido “masajes”.

Tras las declaraciones de las víctimas, los jueces determinaron un cuarto intermedio hasta mañana, a las 8.30, para comenzar con la etapa testimonial, y se estima que el juicio se extenderá hasta el viernes 25 de febrero.

El juicio fue prorrogado en septiembre del año pasado, por solicitud de Giannotti, quien argumentó que el expediente canónico, que fuera solicitado como prueba por la defensa y también por la fiscalía, no había sido recibido a la fecha.

Se calcula que alrededor de 40 testigos pasarán desde mañana por este juicio.

Los hechos por los que se lo acusa a Zanchetta fueron denunciados en febrero de 2019, cuando un joven dio cuenta de “episodios de contenido sexual sufridos en su perjuicio de parte de quien ejercía las funciones de obispo de la Diócesis de Orán», a partir de 2017.

Según la denuncia, estos abusos tuvieron como escenario el edificio del seminario Juan XXIII, de la ciudad de Orán, ubicada a 270 kilómetros al norte de Salta Capital, y en un domicilio particular de la localidad de Los Toldos.

Un segundo seminarista denunció, también, haber sufrido episodios de significación sexual y conductas inapropiadas “frente al público y en el ámbito privado”.

Dichos hechos habrían ocurrido desde 2016, en la casa parroquial San Antonio, en el edificio del seminario Juan XXIII y la casa del Obispo.

Zanchetta renunció a la Diócesis de Orán, el 31 de julio de 2017, tras argumentar problemas de salud, tras lo que abandonó la Argentina y se instaló en España, donde fue nombrado por el Papa como asesor del ente para la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, que gestiona los bienes y propiedades de la Curia Romana.

Además de la causa por abuso sexual, la Justicia salteña investiga una posible estafa al estado o administración fraudulenta mientras Zanchetta era el obispo de Orán, por lo que el 7 de noviembre de 2019 fue allanada la sede del obispado de esa ciudad.

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