El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi sufre desde hace algún tiempo cáncer a la sangre crónico y actualmente se encuentra en cuidados intensivos por una infección pulmonar, dijeron sus médicos este jueves.
Berlusconi, de 86 años y cuyo imperio mediático lo convirtió en multimillonario, está ingresado en cuidados intensivos desde este miércoles en una unidad cardiaca del hospital San Raffaele de Milán, lo que aumentó las preocupaciones sobre su salud cada vez más frágil.
En el primer comunicado sobre su estado, los doctores Alberto Zangrillo y Fabio Ciceri revelaron que Berlusconi había sido diagnosticado en el pasado con leucemia mielomonocítica crónica. No especificaron cuándo se detectó el cáncer por primera vez, solo dijeron que no era agudo.
«Silvio Berlusconi se encuentra actualmente en cuidados intensivos para el tratamiento de una infección pulmonar», dijeron, y agregaron que la enfermedad estaba relacionada con el cáncer.
Dos de los hijos de Berlusconi, Marina y Luigi, llegaron al hospital este jueves, pero no hablaron con los periodistas ni con los camarógrafos que esperaban afuera. Su hermano menor, Paolo, también lo visitó y se fue a la hora del almuerzo con Luigi.
El partido Forza Italia de Berlusconi forma parte de la coalición de derecha de la primera ministra Giorgia Meloni, aunque el ex primer ministro no tiene ningún papel en el gobierno.
«He hablado esta mañana (por este jueves) con el profesor Zangrillo (médico personal de Berlusconi) y me ha dicho que Berlusconi ha pasado una noche tranquila. Su condición es estable», dijo el ministro de Asuntos Exteriores y vice primer ministro, Antonio Tajani, a la televisión pública RAI.
Tajani, un antiguo aliado de Berlusconi dentro de Forza Italia, apuntó que el empresario había sobrevivido a una serie de problemas de salud.
«Todos queremos ser optimistas y esperamos que el león regrese pronto para hacerse cargo del partido. Es nuestro líder político y, por supuesto, nunca se rinde», dijo Tajani a la emisora.
Posteriormente, el partido emitió un comunicado en el que decía que Berlusconi había hablado por la mañana con los principales aliados de Forza Italia e instó al «máximo compromiso» en el parlamento. «El país nos necesita», dijo según lo citado.
Influencia perdurable
El multimillonario magnate de los medios de comunicación, que hizo su fortuna con la televisión comercial, ha sufrido repetidos episodios de mala salud en los últimos años y salió del mismo hospital la semana pasada.
«Debo decir que estoy muy triste. Siento una especie de melancolía, asombro y miedo, porque era un hombre que era grande en muchos aspectos», dijo a Radio 24 la ministra de Turismo, Daniela Santanche.
Berlusconi renunció como primer ministro por última vez en 2011, abrumado por el escándalo, incluidas sus notorias fiestas «bunga bunga», cuando Italia estuvo cerca de una crisis de deuda al estilo griego.
Pero regresó al Senado italiano después de las elecciones nacionales en septiembre y no hay un sucesor obvio como líder de su partido. Además de su perdurable influencia en la política italiana, el conglomerado familiar Fininvest de Berlusconi conserva el control de la empresa de radiodifusión MediaForEurope.
Berlusconi construyó la red de televisión comercial más grande de Italia y obtuvo un perfil internacional como propietario del campeón de fútbol europeo AC Milan antes de ingresar a la política en 1994, cuando la clase política anterior fue derribada por un escándalo de corrupción.
Su salud se ha deteriorado en los últimos años. Se sometió a una cirugía cardíaca en 2016, también ha tenido cáncer de próstata y ha sido ingresado repetidamente en el hospital desde que contrajo covid-19 en 2020.