Por Daniela Barreiro
En el marco de lo que será la gira argentina más larga de su carrera y en un formato más íntimo y austero pero no por eso menos enérgico, el dúo español Amaral presentará en Rosario Hacia lo salvaje, su último disco de estudio. Será en el acogedor Gran Salón de la Plataforma Lavardén (Sarmiento y Mendoza) que Eva Amaral y Juan Aguirre repasarán, el jueves a partir de las 21.30, sus seis discos de estudio haciendo especial hincapié en el último CD que, dos años después de su edición en España, acaba de salir a la venta en Latinoamérica.
Buscando especial cercanía con su público (el espacio elegido así lo denota), los artistas decidieron hacer de ésta una gira acústica en la que los temas sonarán de una forma más intimista que lo acostumbrado, pero a la que no le faltará una buena dosis de energía e improvisación. “Normalmente, un concierto de Amaral sabemos cómo empieza pero no cómo acaba”, aseguró Juan Aguirre a El Ciudadano, al tiempo que aclaró que eso se debe a que la gran apuesta del vivo tiene que ver “con el caos y la improvisación sobre el escenario”.
“La reiteración, el repetir esquemas no va con nosotros –dijo taxativo–; nos miramos y elegimos el rumbo que va a tomar el show en ese momento. Estamos seguros que esa es la magia del directo”.
En comunicación desde España y sin disimular su alegría por regresar a la Argentina, Aguirre contó que Hacia lo salvaje, el sexto disco que edita junto a la bella Amaral, es el tercer material concebido desde la autogestión, desde su propio sello discográfico o, como él mismo denomina, “bajo la bandera de la autoedición”.
“Cuando comenzamos con el sello fue para enfrentar la desaparición de nuestra disquera. La disquera funcionaba bastante independiente, entonces, para seguir manteniendo esa forma de trabajo, decidimos montar nuestra propia empresa”, relató el músico, al tiempo que reconoció el deseo de abordar a otros artistas u otros proyectos, “centrados en la electrónica o en formatos que no tengan que ver con la canción”, según dijo.
Respecto del estilo de Amaral, una agrupación que navega entre las bateas del pop y del rock, el músico aseguró: “Siempre hemos sido un grupo con identidad de rock, con un estilo de vida rock pero también tenemos el gusto por las melodías pop, por hacer canciones luminosas. Pero el hecho de que sean canciones luminosas no tiene que ver con que no puedan tener una especie de amargura o profundidad, algo que no tiene que ver con el pop de «radiofórmula»”.
“Tanto Eva como yo tratamos de hacer canciones que sean pedazos de realidad, a manera de pequeños cortometrajes, como si no fuera una canción sino un pedacito de realidad. No sabemos cuando una canción es buena, pero sabemos cuando tiene verdad delante”, dijo Aguirre.
“En una canción cabe todo lo que sientes –agregó–, lo que ves en las calles, lo que sirve la televisión o el estado de animo que te provocan ciertas cosas. No existen los límites de lo que cabe en una canción. Cuando estás hablando de una relación personal, de empatía, de amor, de amistad, de desamor o de atracción, se puede filtrar lo que está sirviendo el noticiero de esa noche. Los sentimientos no son compartimentos estancos”.
“Nosotros somos un grupo que mira de cara a la realidad que nos rodea, aunque no somos eminentemente políticos”, aseguró el artista originario de Zaragoza, al tiempo que, consultado por la crisis que está atravesando la Unión Europea y en particular España, opinó: “Europa está viviendo un momento convulso, hay un alejamiento de los poderes políticos y financieros del pueblo; eso está provocando intentos de respuesta por parte de los ciudadanos de formas diversas. Hay una tensión no resuelta entre el poder y la ciudadanía”.
“En medio de un mundo convulso, un músico o un inventor de historias debería por lo menos plantearse aportar un poco de belleza. Eso no quiere decir alejarse de la realidad. Puedes hacer música que sea producto del tiempo que te tocó vivir pero también crear algo bello y que trascienda ese tiempo que te tocó vivir”.
De Zaragoza al mundo en seis actos
Originario de Zaragoza, Amaral vendió hasta el momento un total de 4 millones de copias de su discografía compuesta por seis discos de estudio, una edición especial y dos DVDs en directo, desde 1998 hasta la actualidad. Además, supo cosechar premios entre los que destacan tres Ondas de la Música, diez Premios de la Música, dos MTV Europe Music Awards y el Premio Nacional de las Músicas Actuales. El recorrido discográfico de la banda comienza en 1998 de la mano de Amaral, material con el que ganó prestigio en su ciudad natal y que abrió camino para la edición, en 2000, de Una pequeña parte del mundo, con el que fueron considerada la revelación pop de la época. Dos años después salió a la venta Estrella de mar, el álbum más vendido en España en 2002. A partir de allí, la popularidad del grupo no paró de crecer afianzándose de la mano de Pájaros en la cabeza (2005) y Gato negro-Dragón rojo (2008), en el que Aguirre canta por primera vez como voz principal en el tema “Es sólo una canción”. En 2011 salió a la venta el último disco de estudio del dúo, Hacia lo salvaje, material con el que se encuentra recorriendo la Argentina.