El oficialismo en el Senado tiene previsto firmar el dictamen del proyecto de reforma del Código Procesal Penal el próximo miércoles, pero con modificaciones a la iniciativa original.
El plenario de comisiones de Justicia y Asuntos Penales y de Presupuesto y Hacienda volverá a reunirse mañana para escuchar a los últimos especialistas invitados y el kirchnerismo quiere firmar el dictamen al día siguiente para llevar el proyecto al recinto el 19 de noviembre. La última reunión de las comisiones se desarrolló el jueves pasado y sobresalió la ausencia del oficialista Pedro Guastavino, presidente de la comisión de Justicia, y de su compañero de bloque Rodolfo Urtubey.
Según supo NA de fuentes oficialistas, la ausencia de ambos se debió a que están trabajando, junto a un conjunto de asesores, en las modificaciones al proyecto de reforma, en línea con lo que sugirieron algunos de los especialistas que concurrieron a dar su opinión.
Las fuentes consultadas indicaron que una de las modificaciones centrales estará relacionada con el concepto de “conmoción social” como uno de los causales de la prisión preventiva, que fue uno de los puntos más cuestionados por los camaristas y fiscales que pasaron por el plenario de comisiones. En la última reunión, las juezas de la Cámara Federal de Casación Penal Ana María Figueroa y Ángela Ledesma coincidieron en señalar que “no se debe tener en cuenta la figura de conmoción social del hecho para dictar prisiones preventivas, sino la gravedad del hecho”.
La posibilidad de modificaciones en el proyecto ya había sido aceptada por Guastavino, quien dijo que “seguramente va a haber cambios ya que no es un Código cerrado” y por el propio ministro de Justicia, Julio Alak.
Uno de los puntos más criticados por los senadores de la oposición es la facultad que el nuevo Código le da a la Procuración General de la Nación para reasignar causas entre los fiscales, pero hasta el momento hay pocas expectativas de que el oficialismo acepte un cambio en este sentido.