El comedor comunitario Busca Vida quedó destruido la mañana de este martes por un incendio que arrasó también otras dos viviendas en la zona de Avellaneda al 4300, en el corazón del barrio Vía Honda de zona suroeste. Las pérdidas para el centro de asistencia son totales. La mujer que pone el living de su casa para, junto a otros vecinas, darle de comer a 200 niños de varios barrios acusó el impacto del siniestro pero no se rinde: aseguró que de inmediato comenzará la reconstrucción de lo destruido por las llamas. Y, para eso, solicita ayuda a quienes pueden a, a través del teléfono celular 0341-153549762.
“Supuestamente fue un corto que se produjo en el comedor de mi casa y luego alcanzó al comedor, que está en la parte de adelante de la vivienda”, le dijo Adriana Ordóñez a El Ciudadano. “También se incendió la vivienda de mi hijo que está pegada al comedor”, lamentó la mujer.
El comedor Busca Vida funciona hace dos años en barrio Vía Honda. Unos dos centenares de chicos pasan a buscar a diario su ración de comida en diferentes horarios. Esta solidaridad no es acompañada por el poder central: en diciembre, el gobierno nacional le suspendió la ayuda y ahora subsiste gracias a la ayuda de los vecinos que colaboran, incluso, organizando eventos para juntar fondos.
Luego de las pérdidas, Adriana tiene la fuerza necesaria y quiere volver a empezar lo más rápido posible. “Lo voy a volver a poner de pie”, se autoconvence. Huérfana ahora de la responsabilidad estatal, sabe que será arduo, y apela a la sensibilidad social: “Necesitamos todo los que nos puedan dar. Los chicos tienen que volver a comer y lo vamos a lograr con un granito de arena que ponga cada persona“, asegura y da el número telefónico y una dirección –bulevar Avellaneda 4322– para que se contacten los que puedan aportar.
