Mauricio Macri le ofrecerá este martes a Miguel Torres del Sel que sea el presidente del PRO en Santa Fe y que asuma la candidatura a diputado nacional por la provincia en la elección del año que viene. La propuesta se oficializará en un almuerzo en la sede del gobierno porteño a la que el Midachi asistirá acompañado por un par de colaboradores de confianza. Del Sel tiene ya decididas sus dos respuestas. Aceptará ser el número uno del partido y dirá “ni” a la aspiración de llegar al Congreso nacional.
El actor cómico acaba de volver de sus vacaciones. Visitó Puerto Rico pero hizo hincapié en Miami, donde testeó su nivel de popularidad. No es que el voto santafesino en el estado de la Florida le importe mucho, sino que sigue atento su nivel de aceptación por esos lados a través de la repercusión de un programa de TV que protagoniza desde hace unos años. “Ya me reconocen por la calle pero todavía me falta un poco más para ser famoso”, contó a sus seguidores en una reunión que tuvo el miércoles pasado en la ciudad de Santa Fe a efectos de prepararse para su año político. En ella, su inseparable Luciano Laspina y dirigentes con trayectoria como Saturnino Danti Aranda y Germán Mastrocola o noveles como el concejal Carlos Aldasoro, de Venado Tuerto, y Raúl Fernández, escucharon lo que será el diseño de la actividad política de quien obtuvo el 35 por ciento de los votos en la compulsa para gobernador del año pasado.
“Miguel sigue subido al tren de la política. Y, para mí, no se baja más”, contó en reserva uno de sus asesores. Esto es fundamental en la estrategia de Mauricio Macri para 2015, ya que junto con Gabriela Michetti en la provincia de Buenos Aires y Horacio Rodríguez Larreta en la Capital conforma el trípode de inserción nacional en la aspiración presidencial del jefe de Gobierno porteño. De hecho, parte del equipo del ex presidente de Boca siguió trabajando con Del Sel. Emilio Monzó tiene comunicación diaria con el santafesino y el economista Carlos Melconian diseña un discurso más sólido para que el actor evite caer en los diagnósticos muy elementales.
Ésa sigue siendo la incógnita respecto de este outsider de la política. Es evidente que hay un electorado que se cansó de escuchar a los políticos profesionales (sic). De allí que muchos se vieran seducidos por este profesor de educación física que popularizó a la Tota en la tele y que hizo campaña apelando a la honestidad y al trabajo, sin arriesgar un solo concepto político específico. “A (Antonio) Bonfatti hay que darle un tiempo más. Parece buen hombre, pero hay que esperar”, fue la definición más tajante que se le escuchó en su primera reunión política de este 2012. Cuando sus asesores, por ejemplo, le presentan un cuadro de situación del último tarifazo del socialismo en materia de agua o un dossier por los crecientes cortes de luz (de paso, ¿qué calculadora usan los responsables de Aguas para decir que el aumento promedio es del 68 por ciento? ¿Cómo es posible que la intendencia de Rosario no acepte pedir una excepción del tarifazo a los barrios asistidos por cubas?), Del Sel responde con el recuerdo de su paso por la vieja Agua y Energía Eléctrica en la que trabajó por seis años. Y nada más.
En ese mismo encuentro partidario, los representantes del PRO rosarino (Del Sel cree que hay mucho ego en los dirigentes de su agrupación en nuestra ciudad) quisieron conocer la opinión del ex candidato a gobernador sobre el tema de la instalación de boliches bailables en el casco céntrico. Habrá que convenir que no es sencillo analizar el affaire Esperanto ante los dichos pendulantes de la intendencia, que pide abrir el Registro de Oposición de los vecinos al mismo tiempo que su secretario del área decía que eso era inviable, o cuando se reclama que el Concejo se involucre en el tema, siendo que no es su competencia, después de haber conculcado la facultad expresa del Palacio Vasallo para determinar el precio del boleto. También es cierto que bastaría con proponer que de una vez por todas se respeten las normas de insonorización de las discotecas y se dispongan los controles de tránsito en serio. Porque eso pretenden los vecinos. No son preconciliares que se asustan de la posibilidad de pseudomodelos cultoras del más viejo oficio del mundo merodeando por el barrio. Temen que, como siempre, los decibeles de los ruidos dentro y fuera de la disco no sean sancionados por la inveterada ausencia de control municipal. ¿Qué les dijo, en fin, el ex candidato del partido de Mauricio al respecto?: “Hay que darle tiempo a Mónica Fein. Parece una buena mujer. Yo también iba a los boliches y armábamos bardo”.
¿Le alcanzará a Del Sel su anecdotario personal y su “no contaminación dirigencial” para encarar una carrera política con miras a los próximos cuatro años?
Las dos carátulas
“Yo vivo de mi profesión de actor. Y, de ahí, no me bajo. ¿O prefieren que me haga ñoqui de la política y curre como los otros?”. Aquí sí se pone concreto Del Sel cuando se le pregunta si no ve incompatible ser cómico y aspirar a ser gobernador. De hecho, sus emprendimientos inmediatos van viento en popa con la empresa que acaba de contratar a Marc Anthony para un show en Montevideo y la casi certeza de cerrar con Susana Giménez su presencia en los domingos de Telefé.
A la par de esto, afina el Fiat Punto que le cedió un amigo para recorrer, desde esta misma semana que comienza, pueblo por pueblo, toda la provincia de Santa Fe. “Eso es algo que copió del Lole”, dice uno de sus secretarios que, además de pensar en la campera roja del ex corredor, teje iniciativas para acercar al reutemismo disconforme con el actual modelo nacional y sumarlo a sus filas. La misma fuente asegura que Daniel Germano y Carlos Carranza acordarán por natural decantación. Y acota: “No te olvidés que Miguel tiene, además, una excelente relación con Jorge Obeid. El Turco lo vio hace poco en la cancha de Unión y, un poco en serio, un poco en broma, le dijo: «¿Sabés el desastre que podemos hacer juntos?»”. En vistas de lo que serán las alianzas es que Del Sel no quiere decidir aceptar ya ser candidato a diputado. “Eso sin contar que ni él se ve demasiado sentado en una banca del Congreso”, reconoció el mismo asesor.
Desde mañana, Miguel Ángel Torres del Sel vuelve a salir a escena. Con la máscara del actor, a veces, y con la del político en otras.