Tras la disparada de precios de la ropa superior al 100% en un año, el gobierno firmó este jueves un acuerdo con las cámaras del sector indumentaria que congela los valores hasta el 1º de diciembre próximo.
El secretario de Comercio, Matías Tombolini, junto con representantes de la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI) y empresas afines suscribieron en el Ministerio de Economía un acuerdo por el cual el sector se compromete voluntariamente a mantener hasta el 1º de diciembre los precios de la ropa existentes al 5 de septiembre de 2022, garantizando un abastecimiento razonable al mercado.
En el encuentro también participó el ministro de Economía, Sergio Massa, quien agradeció al sector por el esfuerzo e indicó que estas son medidas que responden a estabilizar la situación para poder proyectar la competitividad exportadora de las empresas, el orden en los precios y la estabilidad macroeconómica.
Por su parte, Tombolini resaltó que “este acuerdo nos da previsibilidad para cuidar el bolsillo de las y los argentinos y por eso celebramos el esfuerzo por parte de la industria” y señaló: “Vamos a trabajar juntos para mejorar la oferta y para que el sector pueda exportar más”.
En ese marco, indicó también que la Secretaría seguirá trabajando con el sector para “programar el flujo de importaciones” con el objetivo de que “siga siendo un sector que agrega mucho valor”.
En tanto, el presidente de la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria, Claudio Drescher, apuntó: «Nosotros nos hacemos responsables de que este acuerdo se cumpla y lo hacemos con convicción porque, como cualquier empresario argentino, queremos que el país salga adelante”. “Queremos que esto sea mucho más grande y trabajar con los textiles para que se sumen a esta mesa», añadió.
Este acuerdo incluye los precios de más de 60 marcas que estarán disponibles en todo el territorio nacional en shoppings, supermercados, y locales propios de las marcas. Además, dispone que a partir del 1 de diciembre y por el plazo de 180 días los precios se adecuarán en relación a la variación del tipo de cambio oficial.
Asimismo, este entendimiento prevé mecanismos por parte de la Secretaría de Comercio para auditar y verificar el cumplimiento del mismo. En caso de incumplimiento, la Secretaría procederá de acuerdo a lo establecido por la Ley de Defensa del Consumidor y el Régimen de Lealtad Comercial.
Forman parte del acuerdo las marcas 47 Street, Addnice, Adidas, Akiabara, Amphora, Awada, Ay Not Dead, Azzaro, Baby Cottons, Bensimon, Billabong, Bimba, Bolivia, Bowen, Carmela Achaval, Caro Cuore, Cheeky, Clara Ibarguren, Como quieres, Cristóbal Colón, Cuesta Blanca, DC Shoes, Desiderata, Etiqueta Negra, Furzai, Grimoldi, Grisino, Boer, Jazmín Chebar, Juanita Jo, Kosiuko, Herencia, La Martina, Lacoste, Las Pepas, Lázaro, Levis, Little Akiabara, Lola, Maria Cher, Markova, Midway, Mimo, Mishka, Naum, Nike, Old Bridge, Original Penguin, Paula Cahen D` Anvers, Perramus, Portsaid, Prune, Quiksilver, Rapsodia, Roxy, Sastrería González, Stance, System, Tascani, Taverniti, Uma, Vitamina, XL Extra Large, Yagmour y Zara. Además, el convenio también fue suscripto por la Asociación de Supermercados Unidos (ASU).
También participaron de la firma celebrada en el Palacio de Hacienda la subsecretaria de Políticas para el Mercado Interno, Anastasia Daicich; el subsecretario de Política y Gestión Comercial, Germán Cervantes, y el director Ejecutivo de ASU, Juan Vasco Martínez.
En agosto pasado los precios de las prendas de vestir y calzado tuvieron un incremento del 9,9%, por encima del nivel general de la inflación del mes del 7,0%.
En el año los precios al consumidor aumentaron un 71,9% y otro 109% desde agosto del año pasado, casi 30 puntos porcentuales más que la inflación de ese período.
En marzo pasado el gobierno había firmado un acuerdo similar, que alcanzó a la rebaja de 15 modelos de prendas de vestir, por cuatro meses, con un 30 por ciento de aumento respecto de los precios de la anterior temporada de invierno, pero prácticamente no tuvo efectividad.