Pacientes de hemodiálisis que se atienden en el hospital Centenario quedaron en el medio de una muy triste disputa entre el personal técnico y las autoridades del centro de salud, porque la semana pasada, durante el paro de estatales, se suspendieron alrededor de cien turnos de dialización. Sin esta práctica, los enfermos renales “están en riesgo de vida”. Así lo sentenció el jefe del Servicio de Hemodinamia del hospital, Claudio Mascheroni. La situación puso en alerta a los pacientes y al ministro de Salud provincial, Miguel Ángel Cappiello, quien adelantó ayer que de no llegar a un acuerdo con los sindicatos –hoy habrá una reunión urgente en Santa Fe–, el gobierno realizará una presentación judicial para que cumplan las guardias mínimas. Es que con el paro de estatales de mañana, al que se sumarán los municipales, “no sólo estarán en riesgo los pacientes renales sino todas las atenciones de urgencia cuya demanda no se puede programar”, dijo por su parte Lelio Mangiaterra, titular de Salud municipal.
“Tenemos que ponernos de acuerdo ya con los gremios que, creo, tienen que reflexionar”, dijo Mangiaterra. “Un paro no es más eficiente si muere gente, no hace falta llegar a este extremo, a nadie le pasa desapercibido un paro en Salud, con la suspensión de turnos y atenciones. Hay atenciones primarias que ya se complicaron la semana pasada y que, ahora, pueden ser muy graves”, clamó. “Yo comparto el derecho a la huelga, pero las emergencias no se pueden postergar por un paro”, insistió.
El caso que disparó los más grandes temores fue la falta de diálisis en el Centenario durante el paro de la semana pasada. Una de la voceras de UPCN, María del Carmen Aguilera, defendió ayer que desde el sindicato avisaron con tiempo sobre la metodología del paro “para que nadie quedase sin cobertura” y que ante la ausencia de técnicos y enfermeros “los profesionales podrían atender tranquilamente”.
El jefe de Hemodinamia del hospital replicó que “es imposible que cinco médicos reemplacen a 30 técnicos”. Mascheroni señaló además que “bajo estas condiciones es imposible pensar en un día más de paro” y aclaró que “no existe guardia mínima en diálisis, es el tratamiento”.
Por su parte, Capiello expresó: “Este paro me generó una angustia tremenda y veo que el diálogo y el consenso con los gremios no sirvió”. Y advirtió: “Hablamos con el gobernador, las guardias mínimas las fija por ley el Estado, así que las vamos a decidir nosotros y se lo vamos a imponer a los trabajadores si no se logra un consenso”.