La inminente reforma de la ley orgánica de municipios, mediante la cual Rosario y Santa Fe ampliarán la cantidad de bancas en sus concejos municipales, generó rechazos y adhesiones. El socialismo –que votó en contra en la sesión dela Cámarade Diputados– se opone porque quiere sancionar primero la autonomía municipal a través de una reforma constitucional, para que sean las propias ciudades las que decidan cómo se componen sus órganos deliberativos. No obstante, el ministro de Gobierno y gobernador electo Antonio Bonfatti descartó que se vete la ley una vez que la sancione el Senado. En cambio, el PJ yla UCRavalan los cambios.
El jueves, con el voto de radicales, peronistas y demoprogresistas,la Cámarabaja le dio media sanción a la derogación de la llamada “ley Borgonovo”, impulsada en 2002 por el entonces ministro de Gobierno de Carlos Reutemann, Esteban Borgonovo. Esa norma redujo de41 a22 el número de concejales en Rosario y de23 a13 en Santa Fe. De aprobarse la modificación, Rosario sumaría por lo menos seis ediles y llegará a las 28 bancas en 2015. “No se va a vetar porque ha sido una decisión de la mayoría, pero no coincidimos con ello”, explicó el gobernador electo.
Bonfatti dijo ayer que la decisión de agrandar los concejos “viola la autonomía de los municipios” que, en rigor, no está sancionada. En declaraciones a LT8, el funcionario explicó la postura de su partido: “Votamos en contra cuando se achicó el número de concejales y votamos en contra cuando se agrandó, porque entendemos que es violar la autonomía de los municipios. Los gobiernos municipales tienen que darse sus propios gobiernos. Está en el artículo 123 dela Constituciónprovincial y hay que respetarlo. Por eso proponemos desde hace muchísimo tiempo que la autonomía municipal debe consagrarse a través de una reforma constitucional y hay un proyecto de ley que debería tratarse enla Legislatura”.
Según el ministro, 2012 es el año en que –por no haber elecciones– debe avanzarse hacia la reforma dela Carta Magna.A ese argumento le sumó otro, de índole simbólica: en 2012 se cumplen los 50 años de la última reforma dela Constituciónprovincial. “No por vieja”, continuó, “sino porque hace 50 años determinados derechos no estaban en la cabeza de ningún ciudadano del mundo: derechos del consumidor, del usuario, del medio ambiente;la Defensoríadel Pueblo, el Consejo dela Magistratura, la propia autonomía municipal. La autonomía ya se planteó en 1921, con Lisandro dela Torre; Santa Fe y Rosario tuvieron su estatuyente y su propia carta orgánica”.
El gobernador electo anticipó que una de sus prioridades será intentar la reforma dela Carta Magna: “Vamos a seguir trabajando, tratando de encontrar consensos para poder sentarnos a discutir los principios básicos para una reforma dela Constituciónen la provincia”. Y opinó que, sin autonomía plena, las que se perjudican son “sobre todo las grandes urbes”. Mencionó las cabeceras de los cinco nodos: Rosario, Santa Fe, Venado Tuerto, Rafaela y Reconquista. Y concluyó: “Se concentran muchos servicios, hay que dar respuesta a mucha gente y eso es oneroso. Hay que tener servicios de calidad y eso, en un marco de autonomía, se resuelve mucho más ágil”.
A favor y en contra
La diputada socialista Inés Bertero coincidió con Bonfatti: “Cada municipio debe defender su forma de gobierno”. En cambio, su colega del Frente parala Victoria, Luis Rubeo, señaló que con la aprobación de la ley Borgonovo “se cometió un error y hay que corregirlo”. “La reforma política no pasaba sólo por reducir concejales en Santa Fe y Rosario; esto sirve para alentar la participación de los partidos políticos que tienen menos posibilidades de acceso a una banca, esta norma cercena la posibilidad que esos partidos de tener presencia”, dijo Rubeo. Y remarcó que “se tendrá representatividad sin aumentar el gasto”.
La vicegobernadora y presidenta del Senado, Griselda Tessio, dio por descontado que la ley se aprobará: enla Cámaraalta hay sólo un senador socialista –el rosarino Juan Carlos Zabalza– y los otros 18 son del PJ yla UCR.“Eso todavía no se empezó a discutir en el Senado”, aclaró Tessio. “Pero no creo que haya demasiadas controversias. Verdaderamente sin volver al número de concejales que los municipios de primera tenían antes de esa modificación, si lo que salió de Diputados es el aumento de algunos números, no excesivos tampoco, de concejales. Eso me parece que puede tener un buen tratamiento en el Senado”.
Por su parte, el radical Jorge Boasso recordó que la determinación del número de ediles “es una competencia, hasta que no seamos autonómicos, la competencia es de ley provincial”. “Opino que está bien así, que nos manejamos bien y este Concejo viene trabajando correctamente bien con amplia representación política”, agregó.
En tanto, el edil de Proyecto Sur-PSA, Alberto Cortez, manifestó su satisfacción con la normativa que tuvo media sanción enla Cámarabaja provincial.
“Nosotros estamos a favor, así como coherentemente estuvimos en contra de la ley Borgonovo, porque entendimos que era un mecanismo más que se introducía para acentuar la hegemonía del bipartidismo, de los partidos tradicionales que –en definitiva– representan siempre los mismos intereses”.
Además, sostuvo que “siempre que se discute esto parece que cuando se habla de más representantes hablamos de más gastos”, algo que rechazó. “La prueba está en que cuando se redujo el número de concejales en Rosario para nada eso disminuyó el gasto del Concejo”, concluyó.
Piden por la autonomía
El intendente Miguel Lifschitz le restó importancia al proyecto: “No creo que ningún rosarino esté preocupado por la cantidad de concejales. Nos hemos opuesto a una dirigencia que termina siempre mirándose el ombligo, no creo que ningún rosarino esté preocupado por la cantidad de concejales. No va a cambiar nada entre 22 y28”.
En cambio sugirió, igual que Bonfatti: “Creo que tendríamos que reconocer la autonomía de los municipios, hay que discutir con mayor amplitud. Cada distrito debería poder elegir un concejal de manera directa, hay que modernizar la estructura de funcionamiento de los municipios”.
El socialista Miguel Zamarini, presidente del Concejo, también se pronunció por la autonomía: “Creo que el Concejo tiene una jerarquía que es importante que profundice su rol de relacionarse con el ciudadano. Ese descrédito que tuvo allá por 2001, que lo ha superado este Concejo, me parece que hay que seguir en esa tarea. Primero ciudad autónoma, primero rol del Concejo en esta democracia y luego vemos cuántos concejales harán falta porque sino es exactamente a la inversa la discusión”, dijo Zamarini.