Lucas Sandoval, hermano de Ema Pimpi –quien fue asesinado junto con otras dos personas en la casa alquilada a un camarista civil en octubre pasado–, fue condenado este miércoles a 11 años de prisión por balear a tres personas en junio de 2017. Lucas y Emanuel Sandoval fueron acusados por esa balacera. Pero tras el crimen de Emanuel Sandoval, Ema Pimpi, ocurrido en octubre pasado, sólo su hermano quedó vinculado. Fiscalía solicitó 12 años de prisión para el hombre de 31 años como coautor del delito de tentativa de homicidio, agravado por el uso de arma y portación en tres hechos. Pero los jueces Román Lanzón, Isabel Mas Varela y Patricia Bilotta lo condenaron a 11.
Cerca de la 1.30 del 28 de junio de 2017, Marcos, Juan y Ricardo fueron a comprar droga a un búnker de Cavia al 1400 en barrio Parque Casas, reconstruyó en la audiencia el fiscal Adrián Spelta, quien agregó que existía una presunción de que ese quiosco pertenecía a los Sandoval. Una discusión en el búnker terminó en insultos y amenazas. El trío se fue del lugar y caminó cinco cuadras hasta la esquina de Gallardo y Loureiro (ex Cavia), en donde se quedaron.
Una hora más tarde pasó por esa esquina, un automovilista en un Peugeot 307 y una moto Honda Tornado. Las tres víctimas sindicaron al Ema Pimpi como el conductor del auto que les dedicó una sonrisa y a su hermano Lucas como uno de los ocupantes de la Tornado. A los pocos minutos, volvieron y arremetieron contra las víctimas a los tiros, contó la Fiscalía.
Marcos recibió un disparo en el tórax, mientras que el balazo que sufrió Juan le quebró el radio y le afectó la movilidad de la muñeca. Ricardo, por su parte, resultó baleado en el pie. La investigación apuntó contra los hermanos Sandoval y el primero en caer fue Lucas, apresado en febrero de 2018.
Al mes detuvieron a Ema Pimpi. Ambos fueron imputados por tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y portación. Quedaron detenidos preventivamente por 45 días y al prorrogar la medida, el fiscal Spelta y el defensor Fausto Yrure acordaron que Ema Pimpi y Lucas se fueran a su casa con una tobillera electrónica.
En agosto de 2018, se encendió una alerta por una rotura de tobillera electrónica en el domicilio que había fijado Lucas. Según fuentes del Ministerio de Seguridad, Lucas discutió con su novia, rompió el dispositivo y se escapó. Al mes lo recapturaron y desde entonces estuvo preso. En cambio su hermano mantuvo el beneficio y cambió el domicilio a un chalet ubicado en Pago Largo y Agüero, que resultó ser propiedad del camarista civil.
Un crimen con tinte mafioso
En esa casona, la madrugada del 25 de octubre, desconocidos cortaron la luz y después de romper la puerta con una masa de voleo entraron a los tiros. Mirco Dylan Saldaño, de 21, falleció en el lugar al recibir ocho impactos. Ema Pimpi murió dos horas después en el hospital donde llegó con cuatro tiros en el abdomen. Rocío Genovese, de 22, murió al día siguiente por disparos en el tórax y las piernas. En tanto, Gastón S., de 20, quedó internado en grave estado con disparos en cráneo y cuello. Actualmente se encuentra estable, según una fuente fiscal.
Sobre el crimen existe gran hermetismo. La casona en donde mataron a Ema Pimpi es del camarista Oscar Raúl Puccinelli, quien el día del crimen salió a brindar declaraciones públicas. Dijo que había alquilado la casona a través de la inmobiliaria STI propiedades cuatro meses antes y el inquilino era un joven de 24 años identificado como Matías Langue, hijo de Fernando Lange, uno de los referentes de la Cámara de Radiotaxi de Rosario que también habló por los medios de comunicación y dijo estar sorprendido por la situación.
Fuentes de la Fiscalía informaron que en la investigación por el triple crimen y la tentativa de homicidio de Gastón S., hay medidas en curso que se mantienen en reserva evitando dar detalles de las mismas. Bajo este escenario llegó a juicio oral y público Lucas Sandoval, para quien el fiscal Miguel Moreno solicitó 12 años de prisión. El funcionario lo acusó de disparar contra las víctimas con un arma de grueso calibre desde una moto Honda Tornado. La defensa de Sandoval está a cargo de Fausto Yrure.
Antecedentes
En 2007 Lucas fue detenido con una tumbera calibre 28 en pasaje 1397 al 2000, jurisdicción de la comisaría 10ª, no tan lejos de su casa de Cavia al 1300. Dos años después fue detenido en Cavia y Casiano Casas por resistencia. La versión policial dijo que le había pegado a un efectivo de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE). También le achararon el arrebato de una cartera en Pizzurno y Baigorria. Tiene un antecedente condenatorio a cuatro años.
Mientras estaba detenido, en abril de 2013, sufrió quemaduras en el 25 por ciento del cuerpo durante el incendio intencional ocurrido en la entonces Alcaidía de Jefatura, ahora la Unidad Penal 6. El 13 de octubre de 2013 estaba otra vez en la calle cuando fue apresado por el atentado contra la casa de Gallo y Darragueira del entonces gobernador Antonio Bonfatti, ocurrido unos días antes. Entonces le incautaron una pistola 9 milímetros y un cargador de ametralladora FMK3, entre otras municiones.
Sin embargo, Lucas de entonces 23 años, fue desvinculado aunque su hermano Emanuel aceptó un procedimiento abreviado y fue el único condenado por el ataque a la casa del gobernador.
Lucas recuperó la libertad en mayo de 2017 tras estar algunas semanas preso por un incidente ocurrido frente a la comisaría 30ª, durante el cortejo fúnebre de Alexis Berti, asesinado de un balazo policial en Parque Casas donde los testigos denunciaron una ejecución y no un enfrentamiento como indicaron los policías que intervinieron.