El diputado kirchnerista Jorge Yoma presentó un proyecto de ley para instaurar en todo el país el sistema del juicio por jurados para ser utilizado en los delitos penales considerados graves, como el caso de los homicidios y las violaciones, entre otros.
La iniciativa apunta a que las personas acusadas de delitos con pena privativa de libertad igual o superior a cinco años sean juzgadas por tribunales integrados por unos doce ciudadanos que serían elegidos por sorteo.
“El juicio por jurado conlleva un doble derecho. Primero, el del ciudadano, a ser juzgado por sus pares, y en segundo término, el de estos a tener la posibilidad de participar en la administración de justicia, es decir, ser jurados”, argumentó Yoma, en declaraciones que publicó ayer un matutino porteño.
La violación, abuso deshonesto agravado, homicidio tanto culposo como doloso, lesiones graves y gravísimas, casos de corrupción, lavado de dinero, entre otros, son algunos de los ilícitos que podrían ser juzgados por el sistema de juicio por jurados, igual que se ve en las películas de Hollywood.
Desde 1853, este sistema está considerado en la Constitución nacional, pero nunca logró ser reglamentado, aunque ahora el oficialismo intentará impulsar su instauración.
De todas maneras, legisladores del arco opositor ya expresaron que el tema no figura entre sus prioridades y plantearon que sería complicada su implementación en todo el país.
“Una iniciativa de esta naturaleza debería ser impulsada en momentos políticamente más desapasionados, no en momentos en que el gobierno se encuentra en un enfrentamiento público con la Justicia”, señaló Gustavo Ferrari, del Peronismo Federal.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Justicia, el diputado radical Ricardo Gil Lavedra, dijo que en caso “de instrumentarse, debería ser de manera gradual”.
“En principio tengo una mirada favorable del sistema por juicio por jurados, pero creo que existen dificultades para su instalación en todo el país”, agregó.
El juicio por jurados ya funciona desde hace algunos años en Córdoba y el primer caso se juzgó en la ciudad de San Francisco donde se condenó por homicidio a Víctor Fernando Luna. En esa provincia oportunamente fueron notificados los ciudadanos que en cada asiento judicial están en condiciones de formar parte de un jurado, y sus nombres integran un padrón del que se sortea a quiénes convocar llegado el caso.