El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, calificó de «monstruoso» el asesinato del líder opositor liberal Boris Nemtsov y subrayó la importancia de identificar cuanto antes a sus autores materiales y organizadores.
«Ha sido un asesinato monstruoso y, como dijo el presidente (Vladimir Putin), tiene todos los rasgos de haberse perpetrado por encargo», dijo Peskov en unas declaraciones al canal de televisión «Dozhd».
Al mismo tiempo, aseguró que esta circunstancia «no puede valorarse como el comienzo de una serie de este tipo de asesinatos (por encargo)».
El portavoz recalcó que dichas apreciaciones «están dictadas por las emociones y no se corresponden con la realidad».
«Sin duda, es muy importante identificar cuanto antes a los autores materiales y a los organizadores de este crimen», señaló Peskov.
Recordó que, nada más ser informado del asesinato del líder opositor, el presidente ruso ordenó al Ministerio del Interior, al Servicio Federal de Seguridad y al Comité de Instrucción crear un grupo especial de investigación.
«Sobra decir que este caso es de importancia prioritaria para nuestros investigadores. Para que esta labor dé resultado cuanto antes hay que armarse de paciencia, y esperar, y no crear obstáculos», dijo Peskov.
Por su parte, el portavoz del Comité de Instrucción, Vladimir Markin, indicó que los investigadores manejan numerosas hipótesis sobre los posibles motivos del asesinato, incluso que se haya tratado de un ataque islamista.
«La investigación dispone de información acerca de que Nemstov recibió amenazas por su postura frente a la masacre de los periodistas de la revista ‘Charlie Hebdo'», dijo.
Agregó que los investigadores no descartan que el asesinato del líder opositor sea un intento de desestabilizar la situación en Rusia.
Markin indicó que tampoco se desecha la posibilidad de que el crimen este relacionado con la situación interna en Ucrania, «ya que en las partes en conflicto hay personajes muy radicales que no obedecen a ninguna autoridad».
Nemtsov era uno de los mayores críticos a la injerencia de Rusia en los asuntos internos de Ucrania y había denunciado que miles de soldados rusos combatían en las filas de los separatistas prorrusos.
