A cinco años del surgimiento del movimiento Me Too, comienza un nuevo juicio contra Harvey Weinstein en el tribunal Los Ángeles por 11 cargos de abuso sexual contra mujeres en hoteles de Beverly Hills y Los Ángeles entre 2004 y 2013. El productor que supo ser un magnate en la industria hollywoodense ya cumple una condena de 23 años en Nueva York, donde fue declarado culpable por abuso sexual y violación.
El lunes dio comienzo el juicio que podrá extenderse por dos meses y en caso de ser declarado culpable, el productor ganador del Oscar por Shakespeare apasionado y Pulp Fiction podría enfrentar una pena de 140 años, lo que garantizaría que nunca salga de prisión.
En octubre de 2017 explotaron las denuncias por acoso y abuso sexual contra Weinstein -quien actualmente tiene 70 años-. Más de 80 mujeres, entre las que se destacan figuras como Angelina Jolie, Gwyneth Paltrow y Salma Hayek revelaron que vivieron situaciones desagradables con el productor, que al ser un hombre fuerte de la industria, era casi imposible de llevar a la Justicia.
Por este motivo, la sentencia que recibió en 2020 en Nueva York sentó precedente. Y aunque intentó revertir las condenas, no solo no lo logró, sino que también sumó otra denuncia por agresión sexual a una mujer en Londres, en 1996.
Mientras tanto, el excineasta sigue sosteniendo que los encuentros sexuales con actrices, productoras y trabajadoras de la industria en general fueron consentidos y su abogado señala las dificultades de probarlos con evidencia forense o “testigos creíbles” por el tiempo que ha pasado.
Por otra parte, esta semana se presentará en el Festival de Cine de Nueva York She Said, un documental basado en una investigación periodística de 2017 que muestra cómo se cayó el imperio del magnate del séptimo arte.