El mercado de autos usados sufre un «freno importante» de ventas, las cuales cayeron un 70% tras la devaluación, que provocó una severa distorsión de precios, advirtió e secretario de la Cámara del Comercio Automotor (CCA), Alejandro Lamas.
«Hoy no tenemos una lista de precios, que se basa en el promedio de las operaciones, que es lo que chequea el mercado, para sacar un promedio del valor de los autos usados», explicó en diálogo con Noticias Argentinas.
Lamas alertó que falta una actualización de precios y señaló que «si bien el mercado no está totalmente paralizado, hay un freno importante en las ventas que cayeron 70% después de la devaluación».
Señaló que las terminales «marcan el rumbo de los precios todos los meses, pero ahora no lo están haciendo, porque también deben analizar su situación».
«Ocurre que con la devaluación que le aumentan los costos en dólares, sumado a que a fin de mes vence el plazo del tope para que los autos nuevos en venta no paguen impuestos, no se sabe a ciencia cierta cual es la cotización de los autos» explicó.
El 31 de agosto vence el plazo trimestral para el tope de precios de $8,4 millones, para que los autos nuevos no paguen los impuestos internos sobre las ventas y debe ser actualizado por la AFIP.
Ese tope debería actualizarse según la inflación y el impuesto PAIS con el adicional del 7,5% que dispuso el Gobierno para todos los productos importados de la industria que ingresan al país, tanto vehículos terminados como insumos o autopartes para las fábricas.
Lamas señaló que «muchos toman como precio oficial para los usados la lista de la cámara que por el disley que hay en los precios de las cotizaciones hoy está desactualizada».
«El público consumidor se fija en los sitios de publicación de autos y ve que hay una distorsión de precios y que para el mismo auto y modelo a veces hay diferencias que llegan al doble y confundido retrae operaciones», explico el titular de la CCA.
«Esa dispersión impacta en el mercado y tampoco hay oferta para recomponer los stock», agregó Lamas, quien señaló que la situación «podría normalizarse en la segunda quincena de septiembre», cuando las terminales definan el precio de los autos nuevos, que sirven de referencia en el mercado de usados.
Lamas consideró que «como hoy no tenemos precios para los autos nuevos, que sirve de referencia para el de los usados, el mercado de los negocios se torna muy difícil en un contexto de inestabilidad de precios».